La presidenta de la constructora Essentium y tesorera del Fútbol Club Barcelona, Susana Monje, ha salido al paso de las acusaciones vertidas por algún medio de comunicación (que cita informes policiales) que relaciona a su compañía con supuestos negocios oscuros de la familia Pujol.
Las empresas de Monje están bajo sospecha después de que unos antiguos empleados de sus yates de lujo hayan cursado una denuncia en Estados Unidos en la que vierten acusaciones sobre tráfico de dinero entre paraísos fiscales.
Negación radical
“Jamás he administrado dinero que no fuera de lícita procedencia. Estoy harta de informes apócrifos de la Udef o de quien sea, de manipulaciones y de mentiras: jamás he tenido relación alguna con ningún miembro de la familia Pujol. Las cuentas de mis negocios están todas auditadas y a disposición de las autoridades”.
Las informaciones que desmiente la presidenta de la constructora sitúan a Monje y a Essentium en el centro de la diana de la sospechas policiales vinculadas al blanqueo de capitales. Un delito que la fiscalía atribuye a los Pujol y que está bajo instrucción sumarial en el juzgado central de instrucción número 5 de la Audiencia Nacional.
Sociedades en paraísos por imperativo legal
En declaraciones a Crónica Global, Monje ha admitido que “efectivamente Essentium dispone de sociedades en paraísos fiscales, como por ejemplo en la isla de Man o en Malta, pero que ello “obedece a los requisitos que en materia de derecho marítimo internacional impone la ley que regula la gestión de barcos en aguas internacionales. Estas sociedades tienen como único objetivo la administración de dos barcos veleros propiedad de Essentium. El único dinero que han recibido es el indispensable para pagar la nómina de la tripulación”.
Sin embargo, preguntada por qué se ha radicado a las sociedades en territorio off shore y no en otras zonas marítimas, su respuesta es “no sé”. Monje se ha limitado a decir que son sociedades “sin actividad”.
Tampoco ha dado una respuesta argumentada al motivo por el que la sociedad gestora de los barcos, Safehaven, está radicada también en el paraíso fiscal de la isla de Man.
La actividad de sus empresas
La presidenta de Essentium ha repetido que no conoce el detalle de la actividad de las empresas propiedad del holding que ella preside, porque “su gestión está derivada a la gestora Safehaven”.
Monje dice ser víctima de una operación de chantaje impulsada por los miembros de la tripulación del velero de lujo Nuberu Balu, (bajo control de Essentium), empleados que ella despidió, y que ahora la han denunciado en un tribunal de Estados Unidos. En ese contencioso, los demandantes han portado la información de las sociedades instrumentales de Essentium de diversos paraísos fiscales.