La CUP vuelve a dar 'calabazas' a Mas

La CUP ha impeido, por segunda vez en 48 horas, la investidura de Artur Mas como presidente de la Generalitat, al votar en contra de su candidatura en el segundo debate de investidura que se ha celebrado este jueves en el Parlament.

Mas ha ofrecido a la formación antisistema renunciar a parte de las atribuciones presidenciales y delegarlas a tres vicepresidencias --que encabezarían Junqueras, Romeva y Munté--, y el compromiso de someterse en diez meses a una cuestión de confianza en el Parlament.

El diputado antisistema Antonio Baños ha valorado la oferta de Mas como intersante, pero la ha considerado insuficiente, por lo que la ha rechazado.

"Un 'no' tranquilo"

Baños ha aclarado que su no es "un 'no' tranquilo, porque es un 'sí' a la República catalana que no se acaba". Y ha explicado que la CUP no está "enrocada", sino que pretende estimular, ir más lejos y sumar a más gente al proyecto independentista.

Además, ha asegurado que la CUP no se plantea las elecciones anticipadas como escenario posible, y se ha mostrado dispuesto a seguir negociando para hacer valer la mayoría de 72 diputados que tienen la fuerzas independentistas en el Parlament: "Tiene todo nuestro tiempo para llegar a un acuerdo. Estamos atados a la mesa. [...] El acuerdo está cerca y no lo dejaremos escapar".

Un nuevo "artificio"

El resto de partidos de la oposición también han rechazado la investidura de Mas. La líder de C's en el Parlament, Inés Arrimadas, ha tildado la oferta de Mas a la CUP de nuevo "artificio" --similar a otros, como haberse escondido en el número cuatro de su lista electoral al 27S o habe incluido en ella al líder de la oposición--, y ha considerado que es un intento poner la gobernabilidad en manos de la CUP, algo que cree que ni los suyos le perdonarán.

"Si necesita emociones fuertes porque lo ha hecho todo en el vida y ahora quiere ser un mártir, estupendo; pero deje a los funcionarios y ciudadanos tranquilos", ha añadido.

"No prolongue la subasta dos meses"

El líder del PSC, Miquel Iceta, a acusado a Mas de "dividir el país, CiU, y ahora la presidencia" con su propuesta, y le ha pedido "que no prolongue la subasta dos meses".

Iceta también ha instado a Mas a acatar la resolución del Tribunal Constitucional (TC) que suspende la resolución independentista: "Nadie puede arrastrar a los catalanes fuera de la legalidad. El documento es el error más importante cometido por una institución catalana desde 1977".

"No hay una realidad social para la desconexión"

Por su parte, Lluís Rabell (CSQEP) ha considerado que las dificultades para que la CUP apoye su investidura demuestran que "en el fondo no hay una realidad social para la desconexión" de Cataluña con el resto de España, y ha defendido la celebración de un referéndum.

Rabell ha advertido a Mas de que "esta huida hacia delante lo que hace es darle aire a la derecha españolista más rancia".

"Devaluar" la presidencia de la Generalitat

Finalmente, el líder del PP en el Parlament, Xavier García Albiol, ha acusado a Mas de "devaluar" la presidencia de la Generalitat "hasta convertirla en simbólica", y ha considerado que el acuerdo entre JxSí y la CUP está muy cerca después de las "súplicas" del presidente autonómico en funciones.

Según García Albiol, Mas "ha perdido el norte" y le ha instado a abandonar la hoja de ruta independentista, forjar un pacto de gobernabilidad con C's o el PSC, y acatar las resoluciones del TC.