Susana Díaz tampoco supera su segunda votación de investidura
Los grupos de la oposición en el Parlamento autonómico andaluz no dan su brazo a torcer y siguen votando en contra.
8 mayo, 2015 16:12Se le complican las cosas a Susana Díaz. La líder del PSOE de Andalucía y presidenta autonómica andaluza en funciones ha visto este viernes como todos los grupos de la oposición han vuelto a votar en contra de su investidura, por lo que esta no ha prosperado. Esta es la segunda votación de investidura que pierde Díaz, y la tercera se ha fijado para el próximo jueves, día 14.
El Parlamento autonómico ha rechazado este viernes la investidura de Díaz, con los 62 votos en contra de toda la oposición (33 del PP, 15 de Podemos, 9 de C's y 5 de IU), por los 47 a favor del PSOE. Este es el mismo resultado que se produjo en la primera votación, el pasado martes, en el que se requería la mayoría absoluta para investir a Díaz como presidenta autonómica.
En la votación de hoy -como sucederá en las sucesivas-, solo se requería mayoría simple, por lo que, y de acuerdo con la aritémtica, la líder socialista ya no necesitaba el voto a favor de parte de la oposición, sino solamente algunas abstenciones. Concretamente, la de los 'populares', o la de la suma de Podemos y C's.
Difícil acuerdo en plena campaña
Unas abstenciones, no obstante, que no han llegado. Y que no parece fácil que lleguen en plena campaña electoral para el 24M. En este sentido, Díaz ha expresado que Andalucía "no puede" esperar hasta después de los comicios, y ha acusado a los grupos de la oposición de no permitir gobernar al partido vencedor en las elecciones, a la vez que no presentan ninguna otra alternativa de Gobierno.
Desde la oposición, por su parte, se acusa a Díaz de no haber dado respuesta a sus propuestas concretas para permitir la investidura, y de ni siquiera haber intentado el diálogo al respecto. La principal exigencia de Podemos y C's para investir a Díaz es la dimisión de los ex presidentes autonómicos del PSOE Manuel Chaves y José Antonio Griñán, imputados en el caso de los ERE.
Según establece el Estatuto de Autonomía andaluz, el presidente de la Cámara autonómica -socialista- puede convocar todas la votaciones de investidura que desee, separadas por un mínimo de 48 horas, hasta que una de ellas prospere o hasta que pasen dos meses de las elecciones. Llegada esta fecha -en este caso concreto, el cinco de julio-, si todavía no se ha elegido nuevo presidente, la nueva cámara queda automáticamente disuelta y deben celebrarse nuevas elecciones.