Ballesteros: "Se está diluyendo la fuerza del proceso independentista de forma lógica”

El alcalde de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros, ha considerado que el denominado proceso secesionista "se está diluyendo" de forma "lógica". En una entrevista a la agencia de noticias ANC, el edil ha apuntado a la "decepción" por las "divergencias partidistas" o la mejora de la situación social como posibles causas de esta bajada en el plan secesionista.

"Sí que da la sensación de que se está diluyendo la fuerza de que esto que se llama proceso tenía. Yo creo que se está diluyendo de manera lógica porque hay divergencias partidarias, porque parece que la gente que estaba muy animada y muy movilizada se está desanimando. No sé si por consecuencia de una cierta decepción, o porque la gran desconformidad social está bajando progresivamente. Pero sí que tengo la sensación de que está bajando la efervescencia de este proceso", ha manifestado.

Hay que "hablar de otras cosas" más allá de la independencia

El alcalde también ha señalado que se deben hablar de otros temas que importan a los ciudadanos de Cataluña más allá del plan secesionista promovido por la Generalidad. En este sentido, ha hablado de la industria, la cultura y de tirar adelante "los grandes proyectos de país".

"A mi me gustaría que en este país que es Cataluña y que queremos todos, independientemente de que estemos o no de acuerdo con la independencia, también hablaramos de otras cosas. De la necesidad de que las empresas puedan seguir generando ocupación, que la gente que lo pasa mal tenga oportunidades, que los grandes proyectos de país tiren adelante, que la nuestra política de promoción industrial, es decir, de que haya más industria, tirase adelante, de que la cultura tuviera oportunidades", ha afirmado el edil.

"El discurso del proceso ha tapado una mala acción"

"El discurso del proceso ha tapado una no acción de gobierno, o una mala o poca acción de gobierno, y eso sí que es lo que me preocupa más", ha destacado Ballesteros de forma crítica con la gestión realizada por las distintas administraciones públicas.

Ballesteros finalmente ha incidido en que la oposición no está haciendo su labor porque no exige al Gobierno que gobierne "día a día", valorando este hecho como una "anomalía histórica": "Nosotros podemos hablar de todo lo que queremos, pero no podemos olvidar que hay un gobierno que debe gobernar, y que hay unos partidos que tenemos que exigir que el gobierno gobierne día a día. Y eso sí que creo que ha pasado en un segundo plano, y es una anomalía histórica y real".