Risas, buen humor, complicidad y mucho sentido de Estado. La presentación del último libro del ex embajador, ex asesor de José Luís Rodriguez Zapatero en la Moncloa y ganador del Ramón Llull de Novela, Carles Casajuana, llenó el Centro Cultural Blanquerna de Madrid de destacadas personalidades de la primera línea política. Y es que compartían primera fila el propio Zapatero, su ex director de gabinete José Enrique Serrano, el líder de UDC, Josep Antoni Duran i Lleida, el ex ministro socialista Miguel Sebastián y el delegado de la Generalidad en Madrid, Josep Maria Bosch.

Entre el público, más representación mediática, civil y política con periodistas de la talla de Enric Juliana, Anna Bosch o José Antonio Zarzalejos, el portavoz de UDC Josep Sánchez Llibre, o el presidente del Consejo Editorial de CRÓNICA GLOBAL, Francesc Moreno. Una presentación insólita tanto por su nutrida presencia como por el buen humor que se generó en la sala.

Un libro "para meter el poder en su lugar"

La obra que se presentaba lleva por título 'Las leyes del castillo. Notas sobre el poder', un ensayo muy ameno, que se lee como una novela, sobre los entresijos del poder escrito por un hombre que conoce bien sus interioridades. Sin afán autobiográfico ni ambiciones comerciales, Casajuana citó a Nietzsche para explicar que su libro cumplía con el requisito nietzscheano: los libros que vale la pena leer son los que se han escrito sin intención de ser publicados.

La presentación del libro corrió a cargo del director de La Vanguardia, Màrius Carol, y del ex secretario general de la OTAN Javier Solana, y sirvió básicamente, en palabras de Solana, "para meter el poder en su lugar" y contarnos la "normalidad" de esta condición o privilegio que los ciudadanos corrientes no ostentamos. La fascinación que ejerce el poder presentada de un modo llano, con sus luces y sombras, sus grandezas y mezquindades, y lo más importante, con sus limitaciones reales. El poder desmitificado.

Solana, que como comentó el mismo autor conoce "el castillo por dentro" -en el libro de Casajuana, el castillo es una metáfora del poder constituido-, explicó la experiencia conjunta que tuvieron en la construcción de una política exterior común para la Unión Europea. En el final de su intervención, el ex dirigente europeo apeló "al trabajo bien hecho del buen funcionario", de todos aquellos que obran correctamente y con sentido de responsabilidad.

"El sistema político de la Constitución se ha agotado"

Casajuana se unió a dicha tesis haciendo hincapié en que en Europa y España se vive un momento político extraordinario que requiere de políticos excepcionales. El autor se mostró optimista en que dichos políticos acabarán apareciendo aunque se abstuvo de dar nombres pese a la insistencia de Carol. Ambos coincidieron en afirmar que el sistema político de 1978 estaba agotado: "El sistema político de la Constitución se ha agotado y tenemos que introducir cambios, es un momento que pide políticos de fuste y de gran talla. Yo creo que aparecerán, alguien lo hará, estoy seguro".

Con este deseo de regeneración y recuperación de liderazgo terminó su intervención Casajuana, ante la atenta mirada de un ex presidente de Gobierno, de ex ministros y, en definitiva, de políticos con una larga carrera que conocen los misterios del "castillo" al que el autor del libro hace referencia.

"Una reflexión inteligente del poder"

Después de esta clase magistral sobre política de altas esferas, sobre el poder y los que ocupan el poder, el director de La Vanguardia retomó el hilo de lo que tenía que ser una presentación de un libro. Carol cerró el acto explicando que, si el libro ha sido el ganador del Premio Godó de reporterismo y ensayo periodístico 2014, es porque se trata de "una reflexión inteligente del poder", animando al público a leerlo.

Una vez cerrado el acto oficial se formó un animado corrillo comentado la actualidad política catalana y española en el que fueron más las coincidencias que las divergencias entre los asistentes al acto, esencialmente socialistas y democristianos.