El Gobierno no es quien ha de tomar la decisión sobre si actuar judicialmente contra los responsables de organizar, vulnerando la prohibición del Tribunal Constitucional, el simulacro de consulta secesionista del pasado domingo -a la cabeza de los cuales estaría el presidente de la Generalidad Artur Mas-, ya que esta decisión corresponde solo a la Fiscalía. Esta es la tesis del Ejecutivo para explicar por qué no se ha presentado aun la querella contra Mas por el 9N anunciada durante toda la semana, y así la ha presentado este viernes la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría.
"La Fiscalía actúa de manera autónoma respecto al Gobierno", ha recordado Santamaría, en rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, saliendo al paso de las especulaciones sobre la querella que podría estar preparándose contra Mas por el 9N.
En esta línea, la vicepresidenta ha explicado que "en nuestro sistema" corresponde a la Fiscalía "la defensa de la legalidad" y el "ejercicio de acciones" para "la defensa del Estado", y que el Gobierno debe "respetar" el criterio del Ministerio Público para determinar si "se ha producido o no una actuación contraria a la ley y constitutiva de delito".
Querella detenida
La querella, de hecho, se paralizó en el momento en que parecía inminente que se presentara, y de la reunión entre el Fiscal General del Estado, Eduardo Torres Dulce, y la Fiscalía Superior de Cataluña se dedujo que serían los fiscales catalanes los que decidirían si la tiraban adelante o no. Algunas informaciones aseguraron que fue la fiscalía catalana la que se opuso a presentar la querella con el texto elaborado desde la Fiscalía General del Estado.
Aludiendo a esta polémica, Santamaría ha recordado que la Fiscalía "debe someterse en su actuación a los principios de unidad de actuación bajo la dependencia jerárquica del fiscal general del Estado".
Sobre el hecho de que se haya retrasado o frenado la decisión de presentar la querella, Santamaría tampoco ha querido hacer valoraciones, explicando que el Ministerio Público "tiene sus propios procedimientos y sus propios mecanismos". "No me corresponde a mí entrar en esa valoración", ha concluído.