El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha advertido este lunes de que el Gobierno está “pendiente” del desarrollo de la consulta secesionista alternativa del próximo 9 de noviembre para poder impugnar cualquier decisión por parte del Ejecutivo autonómico que puedan considerar inconstitucional. Y ahora están estudiando el registro de votantes aprobado el jueves pasado.

"Estamos viendo qué es eso, si es un censo electoral alternativo y si ese censo está asociado con una consulta que está suspendida por el Tribunal Constitucional promoveremos también su impugnación", ha señalado.

Para el titular de Justicia, las "líneas rojas" están en la Constitución, que marca "la igualdad de todos los españoles y que la soberanía recae en todo el pueblo español”.

Por lo que respecta a la consulta secesionista original pactada entre las fuerzas soberanistas y que sigue suspendida por el Tribunal Constitucional, Catalá ha declarado que no sabe cuándo habrá una sentencia en firme sobre la misma porque "los temas complejos, normalmente no los resuelven en días o semanas”.