El PP de Barcelona ha denunciado que los gastos de mantenimiento del Borne Centro Cultural para el Ayuntamiento de Barcelona ascienden a 6.570.898 euros en solo 15 meses.
El presidente del Grupo Municipal Popular en el Consistorio, Alberto Fernández Díaz, ha criticado "el agujero económico que supone este equipamiento deficitario al servicio del independentismo" y ha destacado que "en 2013 los ingresos del Borne sólo cubrían el 6,9% de los gastos, un auténtico despropósito, manteniendo las negativas cifras en 2014, ya que la previsión es que los ingresos anuales tan sólo cubran el 16,8% de los gastos".
Además de estos gastos, el concejal ha recordado que también fue el Ayuntamiento de Barcelona quien tuvo que asumir el coste íntegro de la construcción del edificio. Un gasto "desproporcionado de 74 millones de euros".
Un lastre para las arcas del Consistorio
Este 'templo del independentismo' tiene apenas 15 meses de vida y se le augura un futuro cada vez más deficitario a medida que la celebración del Tricentenario de 1714 se vaya alejando.
El político popular ha advertido de que "el déficit previsto para el Borne Centre Cultural irá aumentando" y ha exigido al alcalde de la ciudad, el convergente Xavier Trias, saber qué finalidad tendrá el equipamiento en el futuro, dado que existe el peligro de que "se convierta en un lastre aún mayor para las arcas públicas municipales".
Hace ahora un año, tras su inauguración, el PP de Barcelona ya inició una campaña para denunciar lo que consideró un "gasto excesivo y desproporcionado" del Borne Centro Cultural, con el lema 'Despesa lliure', parafraseando al lema del tricentenario de la batalla de Barcelona de 1714 organizado por el Ayuntamiento: "Viure Lliure".
La Bandera Negra en los ayuntamientos de Cataluña
Este equipamiento ha sido el epicentro de los actos conmemorativos de ese tricentenario, al frente del cual Trias situó a Quim Torra, un conocido activista independentista.
A finales de agosto pasado, Torra salió en defensa de una iniciativa para colgar en los ayuntamientos una Bandera Negra durante la Diada, señalando que hoy "el combate continúa siendo el mismo" que en 1714. "Tenemos que pensar fríamente, maquiavélicamente, para que la próxima jugada pueda ser jaque mate. El momento de la ruptura está cerca y habrá que no vacilar", añadió entonces.