Societat Civil Catalana (SCC) ha presentado este viernes su proyecto a los catalanes residentes en Madrid, en un acto celebrado en el Cercle Català en el que han intervenido el presidente de la entidad contraria a la secesión, Josep Ramon Bosch; el secretario de SCC, José Domingo, y uno de sus vocales, Francesc Moreno.
Ante un centenar de asistentes, Bosch ha animado a los catalanes no independentistas a que "se movilicen y voten en las elecciones autonómicas y las municipales, demostrando así que no están a favor de la secesión de Cataluña", y ha recordado que el objetivo de SCC es "aglutinar a gente desencantada con el nacionalismo, que no cree que la ruptura de España sea la solución de los problemas".
En ese sentido, Bosch ha recordado que este domingo SCC celebra la Fiesta de España mediante una concentración al mediodía en la plaza de Cataluña de Barcelona, y ha animado a los presentes a acompañarles en esa celebración para convertir a Barcelona en "capital sentimental de España".
Más presencia del Estado en Cataluña
Por otra parte, el presidente de SCC ha aprovechado la oportunidad para lanzar una crítica a los diferentes Gobiernos nacionales, al considerar que "el Estado ha dejado de tener presencia en Cataluña y los nacionalistas han aprovechado la oportunidad" lanzando mensajes como el "España nos roba" que han quedado sin la respuesta pertinente y han calado en buena parte de la población catalana.
En ese sentido, Bosch ha insistido en que el desafío secesionista planteado por el presidente de la Generalitat, Artur Mas, y por el conjunto de las fuerzas políticas independentistas no es solo responsabilidad de ellos. "La culpa no es de los independentistas, aunque han sido ellos los que nos han llevado a esta situación; el Estado nos ha dejado solos", ha añadido.
Con la secesión "los problemas económicos, más graves"
Moreno ha advertido de que "la independencia se ha vendido como la panacea" a todos los problemas económicos de los ciudadanos de Cataluña, cuando, en realidad, si se diera una secesión "los problemas económicos serían más graves".
"Habría menos libertad en los medios de comunicación, por ejemplo. La preponderancia de la clase dominante, que ya es grande, sería aún mayor, al estar más concentrada. Como catalanes, la independencia nos perjudicaría. En síntesis, el viaje a Ítaca prometido por Mas sería, en realidad, un viaje en patera de Barcelona a Kosovo", ha explicado.
El vocal de SCC ha indicado que "todos los planteamientos políticos son válidos, pero siempre dentro de la legalidad" y ha augurado que el 9N "no va a haber ninguna consulta", pero sí se tendrá que abordar el futuro con sosiego y con amplios consensos.
"Las diferencias culturales no justifican la ruptura"
Domingo ha señalado que todos los ciudadanos "tenemos diferencias culturales" pero estas "no justifican la defensa de la ruptura de España". Así, ha recordado que "la fractura en Cataluña ya es espectacular y tendrá secuelas importantes".
Por ello, ha reivindicado el papel que deberá asumir SCC en el futuro para ayudar a recomponer "lo común que tenemos todos, que es muchísimo" y "reforzar las relaciones entre los catalanes".
SCC ha anunciado su intención de mantener una "actividad importante" en Madrid, una aspiración que quieren que se concrete en actos como el de este viernes.