La preocupación de Convergencia Democrática de Cataluña sobre su futuro como partido central de Cataluña empieza a ser evidente.
Muchos cuadros del partido no ven claro seguir siendo el pal de paller catalán ante la constante subida de ERC, quien, sin entrar a formar parte del Gobierno autonómico durante los dos años que van de legislatura, no ha visto afectada su popularidad. Más bien todo lo contrario: los sondeos indican una contundente victoria de los republicanos en las elecciones municipales.
Como informa El Confidencial, CDC es consciente de que se trata de una cuestión de supervivencia, y ven en un posible pacto con los socialistas “la única forma de salvar el país del caos en que se convertiría si cae en manos de ERC”. Como ya ocurrió con la experiencia de gobierno de ERC con el Tripartito.
Con el apoyo de Felip Puig
Esta operación entre CDC y el PSC contaría con el apoyo de importantes miembros convergentes que, ante una hipotética desaparición de su partido, optan por el mal menor, es decir, pactar con su eterno adversario político, el Partido Socialista de Catalunya.
Según fuentes de El Confidencial, el mismo Felip Puig, consejero de Empresa y Empleo, hace tiempo que alerta a Artur Mas de la ascenso electoral de ERC en detrimento de CiU y no se descarta que Puig pudiera postularse como el nuevo líder que hace frente a Esquerra y remplazar a Mas ante un más que posible batacazo con la consulta ilegal.