El presidente de la Generalidad, Artur Mas

El presidente de la Generalidad, Artur Mas

Política

Mas insinúa un adelanto electoral si no se puede celebrar la consulta secesionista el 9N

"Me gustaría acabar la legislatura cuando toca, es decir, a finales del año 2016. Digo, si se puede. Y a mí me gustaría que se pudiese. [...] Pero, 'si se puede', demuestra una cosa: que pese a que está sobre todo en mis manos, ustedes han de entender que no solo está en mis manos, ha de poder ser así, y para que pueda ser así se ha de votar el 9 de noviembre con plenas garantías democráticas", señala durante el discurso del apertura del Debate de Política General.

15 septiembre, 2014 17:28

El presidente de la Generalidad, Artur Mas, ha abierto este lunes la puerta a adelantar las elecciones autonómicas si -como todo apunta- finalmente el 9 de noviembre no se puede celebrar el referéndum para la secesión de Cataluña que promueve su partido junto a ERC, ICV-EUiA y la CUP.

"Confío en que el 9 de noviembre se podrá votar con plenas garantías democráticas. [...] A finales de este año llegaremos a la mitad de la actual legislatura, que empezó a finales de 2012 y, si se puede, me gustaría acabarla cuando toca, es decir, a finales del año 2016. Digo, si se puede. Y a mí me gustaría que se pudiese. [...] Pero, 'si se puede', demuestra una cosa: que pese a que está sobre todo en mis manos, ustedes han de entender que no solo está en mis manos, ha de poder ser así, y para que pueda ser así se ha de votar el 9 de noviembre con plenas garantías democráticas", ha señalado durante el discurso del apertura del Debate de Política General.

Reitera que convocará la consulta secesionista

Mas ha defendido que no hay un "choque de trenes" entre Cataluña y el resto de España, sino "un alejamiento de los trenes" porque ya van por vías diferentes. Y ha insistido en que, para que hubiera un choque de trenes, ambos tendrían que ir por la misma vía y en dirección contraria: "Pero Cataluña y el Estado ya van por vías diferentes y en direcciones diferentes. En el fondo, no hay choque de trenes, hay alejamiento".

También ha hecho un llamamiento a la unidad de los partidos que promueven la consulta independentista, y les ha instado a cuidar con delicadeza y formas suaves el consenso, como si fuera "una figura de porcelana fina". Por ello, ha reiterado su compromiso de consensuar las decisiones con estos partidos, así como que, una vez aprobada y publicada la ley de consultas, convocará la consulta del 9 de noviembre en base a su contenido y al decreto de convocatoria.

Aún no vinculante, la consulta tendría "consecuencias políticas, y no pequeñas"

Mas ha destacado que si convoca la consulta es en cumplimiento del mandato del Parlamento autonómico que se constituyó fruto de las elecciones autonómicas de 2012, y que no responde así "a ninguna manía ni a la locura de unos pocos, y sí a la voluntad de muchos expresada donde tiene más valor: en las urnas".

Además, ha recordado que la consulta del 9 de noviembre no es jurídicamente vinculante porque su carácter es consultivo, aunque sí tendrá "consecuencias políticas, y no pequeñas". "Pero las consecuencias son básicamente políticas, y la tarea de los buenos políticos es soldar la legitimidad con la legalidad", ha añadido.

El referéndum, bueno para España

"La partida hay que jugarla, y no tiene las cartas marcadas. Deciden las urnas; decide la gente", ha insistido, y ha asegurado que votar el 9N con garantías democráticas será bueno para la democracia, para Cataluña, y también para el resto de España y de Europa.

Según Mas, si el Gobierno permite votar a los catalanes evidenciará que "entierra la vieja España para redescubrirse tal y como es realmente: plurinacional", y aparecerá como un país de alta calidad democrática, tolerante, capaz de escuchar y de resolver democráticamente lo que, a su juicio, es sobre todo un reto democrático. "¿Cuántos españoles no querrían un Estado así? Auguro que, en estas condiciones, la negociación post-9N sería mucho más serena, constructiva y positiva", ha sentenciado.

"Cataluña se ha cansado del Estado español"

Sin embargo, ha criticado que la única respuesta del Gobierno a las demandas independentistas haya sido decir "no a todo", al Estatuto, al pacto fiscal y a la consulta, y que se intente ignorar y silenciar a los catalanes cuando piden votar. Mas ha reivindicado que desde el nacionalismo se ha colaborado con el resto de España durante años, y ha concluido que Cataluña "no se ha cansado de España, como algunos dicen, se ha cansado del Estado español", y que por eso hay muchos catalanes que ya no lo ven ni lo sienten como suyo.

Esta supuesta "desconexión" de buena parte de los catalanes, se expresa cada vez más -según Mas- en forma de ilusión y no de enfado, y considera que así se ha visualizado en las manifestaciones multitudinarias de los últimos años. Para el dirigente nacionalista, estas movilizaciones son la expresión más evidente de que España tiene "una grave crisis institucional", con acentos y motivos diversos.