Societat Civil Catalana (SCC), entidad contraria a la secesión de Cataluña, ha presentado este jueves una serie de actos para la "concordia" frente al componente "belicista" de los eventos organizados por el Gobierno autonómico en el marco de la próxima Diada.
El presidente de SCC, Josep Ramón Bosch, ha lamentado, en rueda de prensa desde el Colegio de Periodistas de Cataluña, que la ofrenda en el Fossar de les Moreres -santuario del independentismo radical que acogerá el principal acto institucional el 11 de septiembre- es un acto de "antorchas, banderas negras y muertes" que tiene como consecuencia la división de los catalanes.
La carga simbólica de los actos que prepara SCC tiene, por el contrario, el punto de mira puesto en la "reconciliación". Así lo ha anunciado la entidad, que protagonizará una ofrenda floral el 10 de septiembre en Sant Boi (Barcelona) ante la tumba de Rafael Casanova acompañada de Lluís Maria Gonzaga Casanova-Cárdenas y Barón, descendiente del propio Casanova; Mónika de Habsburgo-Lorena, descendiente del archiduque Carlos de Austria, y Carles Veciana i Batlle, descendiente de Pere Antoni Veciana, primer jefe de los Mossos d'Esquadra que luchó del lado borbónico.
Una señera para la "concordia"
El historiador y vicepresidente de SCC, Joaquim Coll, ha explicado que Casanova-Cárdenas y Barón y Habsburgo-Lorena por un lado, y Veciana i Batlle por el otro, son descendientes de los bandos que se enfrentaron en la Guerra de Sucesión española, episodio que, según Coll, se conmemora desde la Generalitat con oportunismo político para "excitar, exaltar y dividir la sociedad entre buenos y malos catalanes".
En la misma línea, Bosch ha indicado que el nicho de Sant Boi en que está enterrado Rafael Casanova es propiedad de Manuel de Bofarull, a la sazón miembro de Societat Civil Catalana.
Susana Beltrán, vicepresidente de esta entidad crítica con el independentismo, ha explicado por su parte que en el acto de SCC durante la Diada en Tarragona se desplegará, a partir de las 18:30 horas, una señera de 50 por 12 metros que conducirán desde la Rambla Vella hasta el anfiteatro romano de la capital de esta provincia catalana.
"Un acto más simbólico que masivo"
Beltrán ha aprovechado la ocasión para aclarar que no se quieren "comparar" con la concentración en forma de 'V' diseñada por las entidades independentistas ANC y Òmnium Cultural. Consideran, no obstante, que la señera expone su voluntad de unidad frente a una estelada que simboliza la ruptura.
"Es un acto más simbólico que masivo", ha reiterado Bosch, quien ha asegurado que "hay mucha gente" con cargos relevantes en Cataluña que apoya la iniciativa pero que no quiere manifestarse públicamente a su favor.
De entre los asistentes confirmados, destaca por ahora la presencia de la exministra socialista Carme Chacón. El acto, que contará con actuaciones musicales y una proyección audiovisual sobre los muros del circo romano, finalizará alrededor de las 21:30 horas con un "mensaje de despedida".