La defensa del ex presidente de la Generalidad y autor confeso de un fraude fiscal cometido durante más de tres décadas, Jordi Pujol, presenta este martes un escrito ante los tribunales andorranos para tratar de evitar que las autoridades españolas que investigan su caso tengan acceso a las cuentas y movimientos bancarios de su familia en ese país.
Según informaba este lunes El diari d'Andorra, los primeros pasos de la estrategia lo constituyen, por un lado, la intención de obtener la nulidad de las últimas revelaciones bancarias -alegando que los investigadores las han obtenido de manera ilícita-, y, por otro lado, y a pesar de su confesión, la defensa del derecho a la presunción de inocencia de los Pujol -en tanto consideran que la Fiscalía de la Audiencia Nacional está llevando a cabo un "escaneo global para ver si se puede imputar un delito a partir de la información recibida".
Los abogados de la familia del ex presidente autonómico inciden, en este sentido, en la supuesta falta de "soporte legal" de las pesquisas, por lo que consideran que las autoridades andorranas no están obligadas a colaborar en la investigación.
"Motivos políticos"
La defensa de Pujol estima asimismo oportuno presentar un recurso contra la comisión rogatoria del juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz porque, según argumenta, todo el proceso está basado en documentación "robada" por algún cargo de la banca andorrana.
Eximen, por ello, a la Banca Privada de Andorra (BPA) y al AndBank de toda responsabilidad, y centran el foco en un presunto "chivatazo" cuyo autor sería un ex trabajador de dichas entidades.
De igual modo, el escrito de la defensa alega "motivos políticos" en la investigación del presidente fundador de CiU y CDC, y procura para ello darle una vuelta de tuerca al victimismo nacionalista arguyendo que el propio Pujol, a la sazón padre del nacionalismo catalán contemporáneo, está siendo investigado justo ahora porque, según apuntan, coincide con el proyecto separatista y con su propia apuesta por la independencia.