El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, ha advertido este jueves que la imposibilidad de conseguir la independencia planteada por el presidente de la Generalidad, Artur Mas, va a producir "una frustración" que a su vez "va a generar una profunda tristeza en Cataluña y en el resto de España".

Así la ha señalado en una entrevista emitida por TV3, en la que ha subrayado que la secesión prometida por el nacionalismo catalán "no es posible":

"Tenemos que ser muy conscientes de que a muchos de esos ciudadanos [catalanes] se les ha dicho algo que no es verdad, y esto es grave, porque se les ha dicho que hay una posibilidad legal, política, económica, jurídica de que Cataluña se secesione de España. Y esto no es verdad. Se les ha dicho que en unos plazos determinados y con determinados instrumentos se va a producir una separación de Cataluña de la nación a la que ha pertenecido históricamente, que es España. Y esto no es verdad. No es posible ni política, ni jurídica ni económicamente. No es posible en el contexto de la legislación española ni de la legislación europea. Se les ha dicho que se podría ser independiente de España pero seguir perteneciendo a la UE, y eso es falso".

Gallardón ha acusado a Mas de no respetar "las reglas del juego" y ha augurado que "la estrategia de CiU, y especialmente de Artur Mas, es ir de derrota en derrota hasta la victoria final, pero no su victoria sino la de ERC, que es evidentemente el partido que ha marcado la agenda y, de alguna forma, devaluar a CiU y el liderazgo que podría ejercer Mas en su condición de presidente de la Generalidad y de propulsor de este proceso". En ese sentido, ha considerado que CiU "se ha dejado secuestrar" por ERC.

"Aquí, con lo que se está planteando, perdemos todos"

El ministro de Justicia ha lamentado que "todo este proceso nos está llevando a un desafecto que a mí me duele, me preocupa, me inquieta". "Por encima de cuáles vayan a ser las consecuencias, las realidades con las que vamos a seguir conviviendo dentro de años, esta no es una batalla de la que uno pueda sentirse satisfecho ganar por el hecho de que efectivamente jurídicamente no hay ninguna posibilidad de alcanzar los objetivos que se están marcando", ha añadido.

"Aquí, con lo que se está planteando, perdemos todos: pierde Cataluña y pierde España. Porque vamos a seguir conviviendo, pero en lugar de juntos, sumando, con afecto, con voluntad de construir como hemos hecho históricamente, vamos a seguir juntos pero con una parte muy importante de la población que se ha distanciado de esos encuentros que permanentemente hemos tenido. Y de eso creo que tiene una responsabilidad muy importante quien ha hecho un discurso falso desde el nacionalismo diciendo que se podía alcanzar algo que no va a ocurrir", ha insistido.

Sin "curiosidad" por saber cuántos independentistas hay

Preguntado sobre por qué no debería permitir el Gobierno la celebración de un referéndum independentista en Cataluña, ha indicado que "por la misma razón que no podríamos hacer una consulta en España sobre una decisión que fuese competencia de la UE, porque la nación española es algo que nos pertenece a todos".

Gallardón ha defendido la Constitución española, que fue apoyada en Cataluña por encima de la media española, y ha rechazado su falta de legitimidad por el hecho de que muchos de los ciudadanos actuales no la hayan votado, ya que la mayoría de las constituciones occidentales fueron aprobadas hace muchos más años que la española.

Tampoco ha mostrado "curiosidad" por conocer cuántos catalanes apoyan la independencia. "Tengo más amor a las leyes y a mi sistema democrático que curiosidad por saber qué piensa la población en un momento determinado, y esa curiosidad se satisface a través de los estudios demoscópicos", ha explicado, además de posicionarse en contra de realizar una consulta a nivel nacional.