Un informe interno del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación sugiere el uso de la selección española de fútbol para hacer política internacional, apoyando, cuando los hubiere, procesos de reconciliación nacional en terceros países tras un conflicto.
Tras la clasificación para la final de la Champions League de dos equipos españoles, Real Madrid y Atlético de Madrid, la Oficina de Análisis y Prevención del Ministerio plantea la necesidad de "iniciar un proceso de reflexión y de selección de propuestas" para desarrollar una "diplomacia deportiva".
El texto, titulado El éxito del fútbol español: clave geopolítica y potencial diplomático, estima oportuno explotar la buena imagen de que goza el fútbol en España al servicio de las relaciones internacionales. Propone, en este sentido, "apoyar desde fuera procesos internos de reconciliación", como hiciera Brasil en Haití en 2004, cuando organizó un partido de fútbol entre ambas selecciones para el que se distribuyeron entradas a cambio de armas, en medio de los esfuerzos por desarmar a los rebeldes leales al depuesto presidente Jean Bertrand Aristide.
"Sentimiento de unidad nacional"
"La selección española de fútbol tiene en este momento un potencial comparable a la selección brasileña", indica el documento. "Es conveniente que la diplomacia española tenga presente este potencial para saber ponerlo a disposición de algún proceso político comparable al de Haití", añade.
En efecto, el Ministerio apunta que el deporte español tiene "un inmenso capital humano insuficientemente utilizado", por lo que, aun cuando no identifica las características de los conflictos en que podrían tomar parte, recomienda que se incorpore a los jugadores, de forma individual o colectiva, en el plantel de Embajadores Internacionales de Buena Voluntad de Unicef, donde "no hay un solo español" actualmente.
La nota catalana del departamento que dirige José Manuel García-Margallo está, en efecto, en la representación de la selección española de fútbol en tanto "sentimiento de unidad nacional". En esta línea, en el informe se lamenta singularmente que "las fuerzas centrípetas existentes en España se hayan disparado en estos últimos años, precisamente cuando la selección ha llegado a reinar en el fútbol como nunca en su historia".
Logros y raíces
"De un simple equipo de fútbol no cabe esperar transformaciones políticas o sociales significativas", dice el informe, al tiempo que, no obstante, sugiere su participación en algún "proyecto nacional exitoso".
En consonancia con lo anterior, el informe del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación resalta cómo la "realidad geopolítica de España", la "proximidad lingüística y cultural" con América Latina, y la libre circulación de trabajadores de la UE, ha permitido desde los años 70, pero sobre todo a mediados de la década de los 90, la llegada de profesionales de este deporte.
La pertenencia, pues, a espacios europeos e iberoamericanos son puestas en valor por este informe, que insta a reconocer cuánto han aportado a España y hasta qué punto podría ayudar a reforzar la "autoestima" de los españoles, proyectando una imagen de España que conecta "sus logros con sus raíces".