El candidato de ERC en las elecciones al Parlamento europeo, Josep Maria Terricabras, sostiene que, en caso de secesión, "la UE correría detrás de nosotros". "No me preocuparía exageradamente", concluye, pues, el filósofo.
El profesor de la Universidad de Gerona advierte, en una entrevista para El País, que "cuando uno se divorcia alguien lo puede ayudar. Si nadie lo ayuda, se divorciará igual".
Por ello, Terricabras apunta que el único "fracaso" consistiría en que "las fuerzas que han pactado la consulta bajen el día 25". "Si suben y nosotros quedamos primeros, estaremos contentos. Y segundos, y ojalá hubiera cuatro o cinco fuerzas más potentes que nosotros", valora quien se declara "hombre del presidente de la Generalidad en Bruselas".
Ser expulsados de la UE "no es un desastre"
"Desgraciadamente oigo al señor Duran hablando de la 'tercera vía'. Es normal que digamos: cuidado", esgrime el catedrático. En su parecer, no existe esa supuesta solución intermedia, y sugiere que sólo hay un camino. "El pueblo ha llegado a la mayoría de edad. Quiere votar y no que alguien decida por él", señala.
Según dice ahora, que planteamientos como el suyo puedan suponer la expulsión de Cataluña de la UE no le preocupa "exageradamente". "No es un desastre. [...] Si mostráramos desinterés, la UE correría detrás de nosotros", estima Terricabras.
El cabeza de lista de ERC en las europeas argumenta como sigue:
"El tratado [de Lisboa] no habla de exclusión automática. [...] Pragmáticamente, la UE ya verá cómo hacerlo. Las 5.500 empresas extranjeras que hay en Cataluña no quedarán fuera de la UE, presionarán. [...] Incluso tiene lógica que [las autoridades comunitarias] se opongan: los Estados no quieren otra tienda en su calle. Pero el día en que se instale, pues se la comen e intentan ser amigos".
Con todo, para Terricabras "no habría ningún problema especial" en quedar fuera de la UE. "Es más", apunta, "en mucha gente crece la idea de hacerse de la EFTA, el libre comercio. Esto se tiene que negociar", añade.