Sigue adelante la ley para prohibir los animales en el circo en Cataluña

Después de las corridas de toros, ahora le toca el turno a los animales en el circo. La proposición de ley para prohibir los espectáculos de circo con animales en Cataluña sigue su camino parlamentario, y ha sido admitida este miércoles a trámite en la Cámara autonómica, después de que el pleno haya rechazado las enmiendas de devolución que se han presentado.

Las enmiendas las han presentado los grupos del PP y C's, y han sido rechazadas por las formaciones impulsoras de la propuesta para prohibir los animales en el circo: CiU, ERC, PSC, ICV-EUiA y la CUP, es decir, todo el resto del Parlamento autonómico. Con esta correlación de fuerzas, las enmiendas se han rechazado por 101 votos en contra, por sólo 27 a favor, de entre los 128 diputados presentes en la Cámara en el momento de la votación.

La propuesta de CiU, ERC, PSC, ICV-EUiA y la CUP modificará la ley de protección de los animales de forma que se prohíban en Cataluña los espectáculos de circo con animales, al considerar que son perjudiciales para su bienestar, y que dan "una visión distorsionada de la realidad y un mensaje educativo negativo". Después de superar el trámite de hoy, el proyecto de ley se redactará en comisión parlamentaria.

PP y C's: el circo, en peligro

Por el contrario, PP y C's argumentaban en sus mociones que esta nueva modificación de la ley puede poner en peligro el futuro de los espectáculos de circo en Cataluña. La ley ya fue modificada en 2010, para prohibir las corridas de toros. Si, como es previsible, la ley se acaba aprobando, Cataluña será la única CCAA española que prohíbe los animales en el circo.

Los 27 votos a favor que han reunido PP (19 diputados) y C's (9), en lugar de los 28 que tendrían que sumar, no se explican por ninguna ausencia, sino porque el partido naranja todavía no ha cubierto la baja de su ex portavoz Jordi Cañas, que renunció voluntariamente al escaño después de ser imputado por presunto delito fiscal, para renunciar a su condición de aforado y ser tratado como un ciudadano de la calle.