El último Barómetro de Opinión Política del Centro de Estudios de Opinión de la Generalidad (CEO), que se publicó el pasado miércoles, incurre en un "notable sesgo" en el sentido de que "las muestras de entrevistados seleccionadas presentan una significativa desviación hacia posiciones nacionalistas y no reflejan de forma representativa y proporcional la composición de la sociedad catalana".
Así lo ha denunciado Convivencia Cívica Catalana (CCC) en un informe hecho público este viernes en el que explica que "el sesgo se constata en cuatro aspectos: las tendencias políticas de los entrevistados, sus usos lingüísticos, su lugar de nacimiento y sus preferencias en cuanto a medios de comunicación".
Este sesgo de la muestra hacia posiciones más nacionalistas de lo que en realidad es la sociedad catalana no es ninguna novedad, de hecho, es recurrente en las encuestas que realiza el CEO.
Tras un análisis pormenorizado de este sondeo, CCC estima que el apoyo a la independencia en un hipotético referéndum, que el CEO sitúa en el 47,1% de los ciudadanos, se reduciría hasta el 36,9% si la muestra se ajustase a la realidad sociológica de Cataluña.
Las formaciones nacionalistas, sobreponderadas
En primer lugar, el informe de CCC destaca que en la muestra utilizada por la encuesta del CEO los votantes de formaciones no nacionalistas, como PP y C's (además de ICV-EUiA), están claramente infrarrepresentados, mientras que los votantes de partidos nacionalistas o independentistas -principalmente ERC, pero también CiU y la CUP- están sobreponderados. Un sesgo que no se corrige cuando se presentan los resultados directos a las diferentes preguntas realizadas en el sondeo (solo se realizan ajustes territoriales y en la estimación de votos).
Mas concretamente, la muestra seleccionada por el CEO incluye un 34,38% de votantes de CiU en las pasadas autonómicas (3,22 puntos por encima de los resultados que en realidad se produjeron); 25,42% de votantes de ERC (11,52 puntos más) y 7,26% de votantes de la CUP (3,73 puntos más). Los que dicen haber votado al PSC (15,50%) prácticamente coinciden con los que en realidad lo hicieron (14,65%). Mientras que los votantes del PP suman el 3,79%, 9,37 puntos menos que los que les votaron en las autonómicas de 2012; los de C's son el 4,04% (3,64 puntos menos), y los de ICV-EUiA, el 6,70% (3,34 puntos menos).
Los catalanohablantes, sobrerrepresentados
La muestra utilizada por el barómetro del CEO también recoge un sesgo en relación a la lengua, sobrerrepresentado a aquellos que dicen tener o utilizar como lengua habitual, propia o inicial el catalán.
Así, un 44,6% de los encuestados asegura que su lengua habitual es el catalán, cuando según los últimos datos disponibles del Instituto de Estadística de Cataluña (Idescat) esta cifra es del 35,6%. En cambio, un 31,6% dice que su lengua habitual es el castellano, cuando el Idescat lo sitúa en el 45,9%.
De igual forma, un 50,05% de los entrevistados por el CEO dice que su lengua propia es el catalán, algo que el Idescat reduce al 37,2%. Mientras que un 37,19% de los sondeados señala que el español es su lengua propia, frente al 46,5% que indica la estadística oficial.
Y el 44,42% de los encuestados indica que su lengua inicial es el catalán, cuando el Idescat los cifra en el 31,6%. Y el 45,87% confiesa que es el castellano, frente al 55% que señala el Idescat.
Los nacidos en el resto de España, infrarrepresentados
Por otra parte, también existe un sesgo en relación al lugar de nacimiento de los entrevistados, infrarrepresentando en 6,78 puntos porcentuales a los ciudadanos residentes en Cataluña que han nacido en el resto de España.
Finalmente, un 52,29% de los encuestados por el CEO dicen optar por TV3 a la hora de elegir un informativo de televisión, mientras que los datos de las agencias de medición de audiencia indican que los informativos de TV3 se sitúan muy por debajo del 30% de cuota de pantalla.
"Herramienta de propaganda"
CCC critica al CEO por excluir el castellano en sus informes. De hecho, las tablas estadísticas solo están disponibles en catalán, mientras que el resumen de prensa se ofrece en catalán y en inglés.
Además, alerta de que la Generalidad se ha gastado más de 200.000 euros en este tipo de sondeos en 2013 y los primeros meses de 2014, en los que la gran novedad ha sido la inclusión de preguntas sobre un hipotético referéndum para la secesión de Cataluña. En concreto, este barómetro ha tenido un coste de 58.660 euros (IVA incluido), un 90% más que el anterior -realizado en noviembre- que costó 30.900 euros.
CCC concluye que el Gobierno autonómico "está utilizando las encuestas como herramientas de propaganda de una hipotética secesión haciendo creer a los ciudadanos que goza de un apoyo superior al que realmente tiene".