El primer secretario del PSC, Pere Navarro, ha instado este miércoles al presidente de la Generalidad, Artur Mas, a repensar su estrategia sobre "el futuro político de Cataluña", después de la sentencia unánime del Tribunal Constitucional que declara inconstitucional la declaración de soberanía aprobada por el Parlamento autonómico de Cataluña.
"Usted está atrapado, porque sabe que sin acuerdo no hay consulta", le ha advertido Navarro al líder de CiU. "De modo que cambie de rumbo, utilice la puerta que le ha dejado abierta el TC, reformemos juntos la Constitución si se quiere hacer la consulta. El PSC está dispuesto a ayudarlo", ha confirmado.
De este modo, el líder de los socialistas catalanes también ha juzgado que la sentencia del TC supone "una puerta abierta" al llamado "proceso" en la medida en que acepta las referencias al "derecho a decidir de los ciudadanos de Cataluña".
No obstante, el mismo fallo del Alto Tribunal apostilla que tales referencias bien pueden responder a aspiraciones políticas, pero siempre que las mismas respeten lo establecido en la Carta Magna y no se proceda mediante actividades que vulneren "los principios democráticos, los derechos fundamentales o el resto de los mandatos constitucionales". Esto es, el "derecho a decidir" no es lo mismo que el derecho a la autodeterminación externa de Cataluña.
"Acabarán subiendo al autobús del diálogo"
Navarro, sin embargo, ha recogido de la sentencia del TC las alusiones al cambio del "fundamento mismo del orden constitucional" siempre que se opere "en el marco de los procedimientos de reforma de la Constitución".
"Si queremos cambiar la relación entre Cataluña y España", ha apuntado en este sentido, "el único camino posible es un cambio constitucional, un camino que el PSC ha marcado hace tiempo", ha defendido en referencia a su propuesta de reforma federal de la Carta Magna.
En efecto, el líder del PSC ha recibido como balón de oxígeno esos elementos de la sentencia del TC que amparan la posibilidad de reformar el ordenamiento jurídico vigente, siempre y cuando, una vez más, se respete la "legitimidad democrática, el pluralismo y la legalidad".
Y así, aludiendo al resto de formaciones que en Cataluña son partidarias de celebrar un referéndum secesionista, ha asegurado que "acabarán subiendo al autobús del diálogo y del acuerdo más pronto que tarde".