Carretero, Carandell y otros miembros de Reagrupament se autoinculpan de sedición

Un total de 16 miembros de Reagrupament -escisión de ERC, que en las últimas elecciones pidió el voto para CiU-, han hecho este viernes un gesto simbólico -y propagandístico- en favor del proyecto rupturista de Artur Mas: se han autoinculpado del delito de sedición, después de que el sindicato ultraderechista Manos Limpias se querellara contra el presidente de la Generalitat ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) por este y otros delitos.

La acción la han protagonizado 16 miembros de Reagrupament, que han firmado un escrito, presentado al TSJC, en el que se autoinculpan de los delitos de sedición y rebelión. Entre los firmantes está el líder de la formación, Joan Carretero, y la número 2, Rut Carandell.

Piden a los ciudadanos que los imiten

En un comunicado, la formación independentista ha hecho "un llamamiento a todos los ciudadanos partidarios de la democracia a sumarse a este gesto teniendo en cuenta que el presidente [autonómico] Mas hace lo que los ciudadanos le encomendaron que hiciera".

Según explica el partido, el secretario de la Junta Directiva de Reagrupament, Ignasi Planas, ha añadido que la querella de Manos Limpias es un "acto de amenaza" contra el presidente de la Generalitat, y ha pedido demostrar que, "ante los ataques del Estado o de cualquier otro contra el proceso", refiriéndose al proyecto independentista de Artur Mas, tendrán delante "a todo un pueblo".

El dirigente de Reagrupament ha concluido con un punto de épica, cuando ha explicado que, en caso de ser imputados, juzgados y después declarados culpables, se enfrentarían a una pena de entre cuatro y ocho años de prisión. Añadiendo que, si tienen que entrar en prisión junto con Mas, lo harán "con el máximo honor y satisfacción" porque se sienten "culpables de democracia".