La segunda reunión del Pacto Nacional por el Derecho a Decidir (PNDD), la plataforma de partidos y entidades -con el apoyo de la Generalidad- favorable a la celebración de un referéndum independentista, se ha cerrado este martes con un acuerdo en un sentido muy claro: centrar sus actividades en la demanda para celebrar esta consulta -de improbable celebración-, omitiendo cualquier preferencia particular sobre la independencia.

Los participantes en la reunión, que se ha celebrado durante dos horas y media en el Parlamento autonómico, han firmado un documento en el que se comprometen a centrar su actividad propagandística llevada a cabo en nombre de la Plataforma en la celebración de la consulta, "como expresión de la voluntad ampliamente mayoritaria de nuestro pueblo", según dice el texto, y "obviando cualquier debate sobre el sentido del voto".

El acuerdo va en la línea de la estrategia de algunos de los partidos favorables a la independencia -notablemente, de CDC- de no incidir en las opciones de voto en la hipotética consulta -anunciada por CiU, ERC, ICV-EUiA y la CUP para el 9 de noviembre-, con la idea de llegar un consenso a favor de la celebración del referéndum, que pueda incluir también a las formaciones y entidades que no apuestan por la independencia, o bien no tienen definida su postura.

Buscando la inclusión de ICV y UDC

Estas formaciones y entidades son minoritarias en el PNDD, pero significativas. Es el caso de UDC -su líder, Josep Antoni DuranLleida, se ha declarado repetidamente en contra de la secesión-; ICV-EUiA, que mantiene una postura ambigua, o los principales sindicatos, CCOO y UGT, que no se han posicionado oficialmente sobre la independencia, aunque últimamente han mostrado signos -muy especialmente, UGT y su secretario general, Josep Maria Álvarez- de crecientes simpatías independentistas.

Según ha explicado en rueda de prensa el coordinador de la plataforma, el ex presidente del Parlamento autonómico Joan Rigol (UDC), las entidades participantes en el PNDD se han comprometido a organizar un plan de actividades propio en el que se centren en los "aspectos positivos" de la consulta, evitando expresamente cualquier crítica a los que se oponen a ella. También pedirán "estimular" la responsabilidad de los ciudadanos.

Además, Rigol ha pedido una gran "movilización ciudadana" para el próximo San Jordi, el 23 de marzo. Específicamente, ha pedido una "explosión de senyeres" -no ha dicho nada de estelades- en los balcones, con el objetivo de hacer visible que "hay un 80% de la población favorable al derecho a decidir".

Los participantes y las ausencias

Entre los participantes en la reunión de hoy había representantes de las formaciones del Parlamento autonómico que apoyan la consulta -CiU, ERC, ICV-EUiA y la CUP; no han participado ni el PSC, ni el PP ni Ciudadanos-, de los sindicatos, o de las patronales Pimec y Fepime -la más importante, Fomento del Trabajo, se desentendió ya en la primera reunión-.

También han estado presentes Òminum Cultural, la Asamblea Nacional Catalana, la Mesa del Tercer Sector, la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos de Cataluña, la Asociación de Municipios para la Independencia , la Asociación Catalana de Municipios -próxima a CiU: no ha participado la Federación de Municipios de Cataluña, próxima al PSC- o el Instituto de Estudios Catalanes.

En en cuanto a las instituciones, ha estado presente el presidente de la Generalidad, Artur Mas; la presidenta del Parlamento autonómica, Núria de Gispert, y los presidentes de las cuatro diputaciones catalanas -los cuatro, de CiU-.