Partidos, sindicatos y entidades nacionalistas han mostrado su rotundo rechazo a la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), recogida en cinco autos que se han conocido este viernes, que ordenan ofrecer un 25% de las horas lectivas en castellano a los alumnos cuyos padres han solicitado enseñanza bilingüe.
Algunas de estas organizaciones, incluso, han exigido a la Generalidad que desacate las instrucciones del tribunal y que siga aplicando la inmersión lingüística escolar obligatoria exclusivamente en catalán.
El secretario de Organización de CDC, Josep Rull, ha propuesto "una convocatoria de todas las fuerzas políticas que avalaron al Ley de Educación de Cataluña (LEC)" para preparar una respuesta conjunta frente a los tribunales de justicia.
El bilingüismo, "un ataque" a Cataluña
La portavoz de ERC y vicepresidenta primera de la Mesa del Parlamento autonómico, Anna Simó, ha criticado la decisión del TSJC por considerar que va contra la voluntad de "la mayoría" de los catalanes, y ha instado al Gobierno autonómico a "seguir defendiendo" la inmersión obligatoria "hasta el final".
La coordinadora nacional de ICV, Dolors Camats, ha animado a la Generalidad a "mantener la inmersión lingüística a pesar de lo que diga el Tribunal Supremo" porque "una sentencia no puede modificar la política lingüística" del Gobierno autonómico. Además, ha asegurado que la inmersión obligatoria en catalán es "un modelo lingüístico de éxito" que "no discrimina".
El diputado autonómico de EUiA Joan Mena ha pedido a la Generalidad que evite que "una imposición jurídica pase por delante de los criterios pedagógicos".
Isabel Vallet (CUP) ha hecho un llamamiento a desobeder los autos del TSJC porque son "un nuevo ataque contra el país [por Cataluña] dentro de una ofensiva que afecta a todos los Países Catalanes".
Un 25% de clases en español, "una ofensiva contra el catalán"
UGT de Cataluña ha emitido un comunicado en el que rechaza la decisión del TSJC por considerarla "un giro más en las políticas de recentralización del Gobierno y la vía judicial del PP para intensificar la ofensiva contra la lengua catalana". Por ello, hace "un llamamiento a defender el modelo de inmersión" y "pide al Gobierno de la Generalidad que continúe blindando el modelo de escuela catalana en lengua y contenidos y que no aplique ninguna sentencia que entre en contradicción con las leyes aprobadas en el Parlamento [autonómico] de Cataluña".
Desde CCOO de Cataluña han rechazado que la justicia deba pronunciarse sobre el modelo lingüístico que se aplica en Cataluña y han asegurado que el castellano no es una lengua marginal en los planes de estudios.
La plaforma Som Escola, controlada por Òmnium Cultural, ha reclamado a la Generalidad "que continúe blindando el modelo de inmersión lingüística" frente a los "ataques judiciales".