Política

"ICV, en la medida en que apoya esa consulta [secesionista], va perdiendo posición como partido de la izquierda para la defensa de los intereses populares y de clase. Pues resultará engullido por los intereses de los partidos, como la coalición gobernante en Cataluña, claramente derechistas y corruptos. [...] Debe plantearse seriamente abandonar el pacto suscrito, más que discutible democráticamente y, en cualquier caso, claramente independentista"

21 diciembre, 2013 20:01

Carlos Jiménez Villarejo, ex fiscal anticorrupción de Barcelona y miembro de Federalistes d'Esquerres, este jueves en El País:

"[...] Mientras en Madrid CiU negocia y acuerda con el PP la aprobación de una ley antidemocrática [la Ley de Seguridad Privada], aquí, en Cataluña, consigue el apoyo de ICV que legitima la incorporación de la izquierda a sus planes soberanistas. Naturalmente, ICV, en la medida en que apoya esa consulta, va perdiendo posición como partido de la izquierda para la defensa de los intereses populares y de clase. Pues resultará engullido por los intereses de los partidos, como la coalición gobernante en Cataluña, claramente derechistas y corruptos. El primer ejemplo lo acabamos de describir. ICV no presenta reparo alguno en pactar con una coalición que acaba de aprobar la ley que privatiza la seguridad pública hasta límites muy graves. Una ley que viola el artículo 17 de la Constitución sobre el derecho a la libertad personal y suspende la vigencia del régimen democrático de la detención de las personas contenido en la Ley de Enjuiciamiento Criminal. Un verdadero atropello a las garantías democráticas de los ciudadanos.

[...] El problema es que hace tiempo que ICV sufre una grave desorientación. Un día de estos, Joan Herrera se refería al derecho a decidir 'como elemento troncal del catalanismo'. ¿De qué catalanismo? O es que el catalanismo de ICV es el mismo que el de ERC y CiU? Con independencia del escaso rigor con que hablan del derecho a decidir, es inadmisible que un partido que se define de izquierda, ante la crisis colosal que sufren las personas y familias de las clases medias y bajas, anteponga, por razones tácticas, su alianza con los partidos responsables de esa crisis a la creación de una nueva identidad catalana, que debe tener su eje en las clases populares y que se fundamenta en la solidaridad con los pueblos de España que padecen la misma crisis que los trabajadores catalanes.

[...] Creo que es un buen momento para rememorar a quienes, dirigentes del PSUC, formularon otro catalanismo que ICV ha olvidado. Nos referimos al 'catalanismo popular' tan bien definido por Antonio Gutiérrez Díaz en 1980, sí, hace mucho tiempo, pero mucho mas coherente con una política de izquierdas. Por otra parte, ¿no estamos releyendo a Marx? Decía así: 'La Cataluña de hoy es la Cataluña de todos y no dejaremos que nos la arrebaten aquellos que con nacionalismos extremos y provocadores quieren utilizar la bandera catalana para esconder sus intereses de clase. [...] No debemos caer en la trampa de dejarla en manos de aquellos que la quieren para disimular que las tienen sucias. [...] Y frente al catalanismo instrumental de la derecha opondremos un catalanismo popular de progreso. [...] Frente a la retórica gesticulante y vacía de la derecha catalana -una derecha estrechamente ligada con la derecha española- haremos avanzar Cataluña por la vía de un catalanismo popular que evite las divisiones de nuestra colectividad, que acabe con las provocaciones interesadas del ultranacionalismo chauvinista'.

Esta es la senda que ICV debe recuperar urgentemente. Para dicho fin, debe plantearse seriamente abandonar el pacto suscrito, más que discutible democráticamente y, en cualquier caso, claramente independentista".