Al contrario de lo que defienden los actores implicados en el proyecto, el método pactado por CiU, ERC, ICV-EUiA y la CUP para celebrar un referéndum independentista (esto es, las dos preguntas propuestas) es cualquier cosa menos claro.

Así lo ha reconocido la propia secretaria general de ERC, Marta Rovira, en una entrevista en TV3. Si este viernes defendía que la opción independentista debería considerarse la ganadora de la votación aunque no recibiera el 50% de los votos emitidos -lo que podría suponer un fraude metodológico-, este lunes, Rovira ha ido más allá y ha reconocido que la fórmula acordada podría dar lugar a tres interpretaciones diferentes para un mismo resultado:

"El recuento [del referéndum] será único, el recuento es muy claro; las interpretaciones del resultado hay mucha gente que las defiende de forma diferente. Hay seguramente tres grandes posibles interpretaciones del resultado: hay una interpretación que dice que el resultado será el de la segunda pregunta, aquel resultado que sea mayor, un sí o un no al Estado independiente; hay una segunda forma de interpretar estos resultados que dice de las tres posibles respuestas, el no, el sí-sí y el sí-no, aquella respuesta que tenga un 50% más uno de los votos emitidos; y hay una tercera forma de interpretar estos resultados de mucha gente que también dice que estamos ante tres respuestas (no, sí-sí y sí-no) y que, por tanto, ganará aquella respuesta que tenga más votos".

"Trabajaremos para que la interpretación quede clara"

A pesar de esta posición, Rovira ha asegurado que "esta pregunta" -en realidad, dos preguntas- "es una buena pregunta" porque "es la primera vez que tenemos la oportunidad de votar independencia" y porque "tenemos la oportunidad de ganarla".

En cualquier caso, la dirigente independentista ha señalado que "trabajaremos hasta el último momento para que esta interpretación quede absolutamente clara, justa y democrática", algo que espera sea recogido en "un reglamento o un decreto de convocatoria".

En este sentido, Roviera ha señalado que una papeleta que marque el 'no' en la primera pregunta y también marque una respuesta en la segunda "evidentemente" será considerada nula.

Y ha reconocido que todavía no tienen decidido si entrarán en el Gobierno autonómico, como plantea CiU. "Haremos lo que haga falta para mantener vivo este 9 de noviembre y para que los ciudadanos de Cataluña salgan adelanta. Asumiremos las responsabilidades que haga falta", se ha limitado a indicar.

ICV-EUiA rechaza la interpretación de ERC

En relación a la falta de claridad del procedimiento acordado para el referéndum, el líder de ICV-EUiA, Joan Herrera, en una entrevista publicada este lunes en El Periódico, ha contradicho frontalmente la posición de ERC, asegurando que no considerarán como ganadora la independencia si esta no obtiene el 51% del total de los votos emitidos.

"Pongamos un ejemplo. Un 60% vota 'sí' en la primera pregunta y un 51% vota 'sí' en la segunda. El resultado: un 30,6% de votantes a favor de la independencia. ¿Es razonable? Todo el mundo sabe que no. Un proceso como este se basa en la correlación de fuerzas", ha advertido.

Además, Herrera ha recordado que "en los procesos [independentistas] más recientes, Kosovo y Montenegro, la UE pidió el 55% de los votantes".

ERC, abierta a modificar las preguntas

Así las cosas, cuanto más se analiza la fórmula acordada para el referéndum independentista -de improbable celebración- más dudas parece que surgen en el seno de ERC.

Como muestra, basta con constatar la posición del vicesecretario de Comunicación del partido, Oriol Amorós, quien este mismo lunes incluso ha abierto la puerta negociar con el Gobierno una posible modificación de las preguntas acordadas. "Sin renunciar a que la fecha no sea demasiada lejana y a que los catalanes tienen el derecho a decidir si quieren o no un Estado y un Estado independiente, se puede hablar de todo y estaría bien hablar de todo", ha señalado al respecto.