El ex presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE) ha declarado este lunes que la "cuestión de Cataluña", fruto de la deriva independentista del "nacionalismo político mayoritario", es "de gran calado" y por ello hay que tratar de "reconvertirla", entre otras cosas porque "la mayoría de los argumentos que esgrimen no tienen fundamento".

Zapatero, en una entrevista para Onda Cero, ha instado a todas las fuerzas políticas a "recuperar una capacidad de diálogo", si conviene hasta la "extenuación", puesto que "el tiempo pasa y no precisamente a favor de recuperar" el consenso. En este sentido, el ex dirigente socialista ha celebrado que Mariano Rajoy (PP) "haya mantenido hasta ahora una actitud de cierta prudencia" ante el órdago secesionista, pero advierte de que esa "no es la solución".

Asimismo, Zapatero ha lamentado que el polémico simposio titulado "España contra Cataluña: una mirada histórica", programado en el marco de la conmemoración del tricentenario de 1714, incide en la "dicotomía España contra Cataluña y Cataluña contra España" que es, a sus ojos, "realmente muy poco edificante". De hecho, según el ex presidente, el sesgo inherente a ese proyectado ciclo de conferencias "intelectualmente es muy difícil de asumir, porque sería tanto como decir 'España contra sí misma'".

Para Zapatero, el problema "evidente y preocupante" de este asunto "es que el nacionalismo político mayoritario de Cataluña parece que se va hacia el soberanismo". "Esto hay que intentar reconvertirlo", ha alertado, "porque, si no, estaremos en una situación difícil". "Sabemos que la mayoría de los argumentos que esgrimen no tienen fundamento", ha apostillado, "pero también sabemos que el sentimiento está ahí".

"A Cataluña hay que darle una respuesta... porque es España"

La receta que propone el último presidente socialista no pasa, contrariamente a la versión oficial de su partido, necesariamente por una reforma federal:

"Este es un debate de etiquetas y de denominaciones que quizás no nos lleve a ningún puerto para aclararnos. [...] Se trataría de intentar que una reforma de la Constitución [...] pudiera dar una respuesta a aquellos problemas que tenemos, y hay problemas en el funcionamiento de nuestro modelo de estado, problemas serios".

Entre otros, cita "un problema de lealtad, de cooperación, de lealtad de todas las CCAA". Y por encima de todos ellos sigue destacando la "cuestión de Cataluña". "A Cataluña hay que darle una respuesta", ha terciado Zapatero. Por la sola razón de que "España necesita a Cataluña, España quiere a Cataluña, porque Cataluña es España".

Así, el ex líder del PSOE se pregunta si es conveniente defender una "inspiración federal" en los planteamientos de reforma de la Constitución. Y su respuesta es "no, inspiración que ayude a resolver los problemas". A partir de aquí, "si unas [reformas] se parecen a lo que dicen los Estados federales, pues mejor; y si no, pues también pueden ser útiles".

Zapatero ha ido un tanto más allá y ha argumentado que los "problemas" por los que atraviesa España no son "sólo de falta de clarificación de la distribución de competencias" o "de falta de clarificación en la financiación autonómica", entre otras cosas porque "la Constitución casi no dice nada de esto".