El consejero de Interior, Ramon Espadaler (CiU), asegura que tampoco conoce el informe elaborado por el Cesicat que explica cómo crear una agencia de inteligencia que dependa de la Generalidad. Preguntado por los periodistas, en el Parlamento autonómico, el consejero ha señalado que: "No, no lo conocía".
Espadaler, sin embargo, no ha podido negar que el documento del Centro de Seguridad de la Información de Cataluña sea verídico y se ha remitido a las palabras de Artur Mas (CiU), presidente de la Generalidad, en el pleno parlamentario de este miércoles, quien se ha limitado a asegurar que el informe no ha sido encargado por él.
El organismo que depende de la Consejería de Empresa y Empleo, en manos de Felip Puig (CiU) -que tampoco desmintió en sede parlamentaria la utilización de un programa espía en móviles repartidos por la Generalidad-, quien ocupó la cartera de Interior antes de Espadaler, señala en el informe que el gasto de la Agencia Nacional de Seguridad de Cataluña debería llegar a los 28,9 millones de euros.
En el momento de máximo rendimiento, la agencia de inteligencia -que legalmente solo es competencia del Gobierno- debería tener 306 agentes secretos de los Mossos d'Esquadra, y debería configurarse al estilo del CNI español o las otras agencias de inteligencia de los distintos países. El documento fija, incluso, dónde estaría la sede, el perfil que tendría el director de la agencia y quién la controlaría.
Contacto con los servicios secretos de Israel
Además, entre los pasos a seguir, según consta en el informe, la ANS debería abrir varias "líneas de actuación en paralelo". Entre estas, destaca la de "entrar en contacto con los servicios de inteligencia de Israel para conocer la organización de su agencia de Ciberseguridad", este "contacto" se debería hacer a través de la Ertzaintza que "tiene buenos contactos con empresas y el mundo gubernamental israelita".
En esta línea, el informe del Cesicat también señala que la agencia de inteligencia debe entrar en contacto con el "Massachusetts Advanced Ciber Security Center con el objetivo de conocer el funcionamiento, organización y actividades" y "planear un posible marco de colaboración".
Y otra de las "líneas de actuación" sería la de "dimensionar y cuantificar las actividades, subcontrataciones y herramientas en aspectos de seguridad que se realizan en todo el entorno de la Generalidad". Todo esto dejando claro -según se apunta en el documento- que el encaje jurídico de la agencia no está definido.