Montoro permitirá aplicar a las CCAA un impuesto sobre los depósitos bancarios

El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha anunciado este lunes que el Gobierno permitirá finalmente que todas las CCAA que así lo decidan puedan aplicar un impuesto sobre los depósitos bancarios, aunque "con límites". Este polémico impuesto, que la Generalidad de Cataluña aprobó ahora hace casi un año, incluso antes de empezar oficialmente la legislatura, ha generado toda una serie de desencuentros entre el Gobierno y algunas CCAA, que les han llevado a los tribunales.

Montoro, en su intervención en un almuerzo informativo de Europa Press, ha explicado que, en la reforma fiscal que planea el Ejecutivo, se contemplará que los gobiernos autonómicos puedan aplicar este impuesto. El ministro ha admitido que esta tasa no es de su "devoción", y ha recordado que, por eso, el Gobierno la recurrió ante el Tribunal Constitucional. Pero, aun así, permitirá aplicarla "con límites". Unos límites que pasarían para garantizar que no se rompa la unidad de mercado, fijando una horquilla para el tipo que puedan aplicar todas las CCAA.

El impuesto sobre los depósitos bancarios lo instauraron inicialmente tres gobiernos autonómicos, el de Extremadura, en 2001, y posteriormente los de Andalucía (2010) y Canarias (2012). El diciembre del año pasado, justo después de las elecciones autonómicas, y antes de que se cerrara el pacto entre CiU y ERC que garantiza el apoyo de los independentistas al Gobierno autonómico de Artur Mas, la Generalidad aprobó un tributo análogo, que no se ha aplicado nunca.

Una norma que no se ha aplicado nunca en Cataluña

Inmediatamente después, el Gobierno recurrió el impuesto de la Generalidad al Tribunal Constitucional, que lo dejó en suspenso durante cinco meses, para levantar posteriormente la suspensión. Pero la razón que no se aplicara nunca no es sólo esta, sino que el Gobierno instauró a la vez -también en diciembre del año pasado- un impuesto sobre los depósitos bancarios a tipo cero.

Como que esta norma tiene carácter nacional -y, por lo tanto, es de rango superior a las autonómicas-, y como que no se puede grabar un mismo concepto dos veces, los impuestos autonómicos sobre los depósitos han quedado, en la práctica reducidos a cero. El Gobierno está compensando económicamente las tres CCAA que ya tenían el tributo en vigor, Extremadura, Andalucía y Canarias, pero no así Cataluña, donde no llegó a entrar en funcionamiento.

A pesar de que son dos conceptos que no tienen nada a ver, si la decisión que ha anunciado Montoro se confirma, esto podría tener efectos prácticos en los trabajadores públicos de la Generalidad. La explicación es que el Gobierno autonómico -cómo ha repetido varias veces golpes el consejero de Economía y Conocimiento, Andreu Mas-Colell- ha vinculado revertir la eliminación de una paga extra a sus funcionarios al hecho que el Gobierno permita recaudar este impuesto a los depósitos bancarios.