Francesc Homs considera "una hipótesis imposible" que el Gobierno, a través del Senado, pueda suspender la autonomía de la Generalidad, en caso de que esta incumpla las leyes y declare la independencia unilateral o convoque un referéndum de autodeterminación.
El portavoz de la Generalidad y consejero de la Presidencia autonómica ha asegurado, en una entrevista publicada este domingo en El País, que "un proceso" secesionista como el que están impulsando CiU y ERC desde las instituciones públicas "es imparable".
En este sentido, descartada la intervención política -económicamente, la Generalidad está intervenida- y con un proyecto "imparable", la independencia acabará llegando: "En otras épocas se habría podido parar con el uso de la fuerza. Pero en el siglo XXI los catalanes tenemos las de ganar. Pueden sacar a uno y meter a otro, pero si esto es sólido, acabará ganando".
"Desaparecer" como catalanes
En este sentido, Homs ha defendido que la celebración de un referéndum independentista "es irrenunciable" en cualquier negociación con el Gobierno, al que ha acusado de no moverse para solucionar el problema planteado por el nacionalismo catalán y que, cuando lo hace, es en la dirección contraria a la deseada por CiU, aprobando la ley Wert -reforma educativa en trámite parlamentario- .
Para el dirigente de CiU, independentista confeso y mano derecha de Artur Mas tanto en el partido como en la Generalidad, el Gobierno y las Cortes Generales están pidiendo a los nacionalistas que dejen de ser catalanes ya que, desde su punto de vista, la ley Wert les invita "a desaparecer" porque, entre otras cosas, limita la autonomía de las consejerías de educación.
Así, la celebración de un referéndum, bajo el eufemismo del "derecho a decidir", es imprescindible porque es "un principio democrático". Pero ha criticado que se utilice este mismo "principio democrático" para reclamar que la ciudadanía decida si, por ejemplo, quiere que los gobiernos apliquen recortes sociales.
Hechos consumados
Por otro lado, el consejero autonómico ha indicado que si la Unión Europea (UE) aplica las leyes comunitarias e internacionales, dejando a una Cataluña independiente fuera de la UE, en caso de una secesión, esta "estará acabada como proyecto", ya que habrá expulsado "a siete millones de ciudadanos".
Desde su punto de vista, "el día que [la UE] expulse a siete millones de habitantes ya no se podrá presentar ante el mundo como un proyecto de suma" y ha indicado que "nunca" a visto "a nivel internacional" que se tomen decisiones "atendiendo literalmente a la literalidad del derecho" y sí gracias a "hechos consumados". Pero no ha sabido aportar un solo ejemplo.
Finalmente, Homs ha señalado que la lista de supuestos agravios contra Cataluña que presentó la Generalidad hace unos días debería ser un documento utilizado por el Gobierno "para negociar" con CiU.