El ex presidente del Gobierno José María Aznar (PP) ha advertido este lunes de que "hay que poner fin al desfalco de soberanía nacional que se está llevando a cabo por parte del nacionalismo", y ha subrayado la necesidad de "afirmar la realidad nacional de España" ante las "grotescas deformaciones históricas a las que la someten aquellos que rechazan una comunidad de ciudadanos libres e iguales".
Aznar ha lanzado este claro mensaje al presidente del Gobierno y de su partido, Mariano Rajoy, durante una conferencia sobre las víctimas del terrorismo pronunciada en San Sebastián (Guipúzcoa).
El ex dirigente popular ha insistido en que quien busca la secesión pretende "una separación de las exigencias de la democracia, del pluralismo". "No les molesta España -no les ha molestado nunca- lo que les molesta es que España significa libertad", ha añadido.
"El silencio puede dañar la verdad tanto como la mentira misma"
En presencia del delegado del Gobierno en el País Vasco, Carlos Urquijo; del europarlamentario del PP Carlos Iturgaiz y del portavoz en el Ayuntamiento de San Sebastián y vicepresidente del PP en Guipúzcoa, Ramón Gómez, Aznar se ha explayado en sus explicaciones:
"España no es, no puede ser, una mera idea ni una opinión entre otras. España ha de ser una realidad jurídica segura, indudable, previsible, puesto que ésa ha sido la voluntad de los españoles recogida en nuestra Constitución".
Y ha alertado de que "no hay moderación en aceptar la ilegalidad; no hay prudencia en consentir que un poder se ejerza por quien no debe y para lo que no debe; o en que no se ejerza por quien debe y para lo que debe. No hay tolerancia en admitir la ausencia o el vacío del Estado de derecho. No es una virtud del Estado dejarse desafiar cuando se funda en el derecho y sirve a la libertad".
Según el ex presidente del Gobierno, quien "ignora, incumple, suspende o aplaza" el cumplimiento de los preceptos constitucionales "está fuera de la ley y actúa contra la voluntad nacional", por lo que "debe percibir sin que le quepa la menor duda las consecuencias de sus actos".
Aznar ha asegurado que España se encuentra ante "un momento decisivo" de su historia, "un momento que exige de nosotros lo mejor que tenemos". Por ello, ha advertido de que "el silencio puede dañar la verdad tanto como la mentira misma".