El ex ministro de Defensa, ex presidente del Congreso y ex presidente autonómico de Castilla-La Mancha José Bono (PSOE) tiene muy claro cuál es el principal culpable del auge del independentismo en Cataluña: el PSC. Pero no tanto por la posición actual de los socialistas catalanes, sino por sus actos del pasado. Y muy concretamente, por haber pactado con ERC para gobernar después de las elecciones autonómicas de 2003 y 2007, a pesar de que en ambos comicios CiU fue la fuerza más votada.
Bono, en una tertulia en el programa Las mañanas de Cuatro, ha reconocido que el independentismo alcanzó un "gran éxito" durante la Diada. "No reconocerlo sería absurdo", ha insistido. Añadiendo que este hecho les produce "una gran tristeza", porque "estamos a las puertas de la independencia de Cataluña".
No ha dudado a la hora de cargar la responsabilidad a sus correligionarios catalanes. "Lo del PSC no tiene nombre. Tienen gran parte de culpa del sentimiento independentista", ha dicho Bono. Y ha explicado que, durante la época de Jordi Pujol, CiU "se dedicaba a lo que se dedicaba, pero no a predicar la independencia", y que "no es de extrañar" el auge del independentismo después de que el PSC se aliara, por dos veces, con "los independentistas republicanos", en alusión a ERC.
Se opuso al tripartito desde el principio
El análisis de Bono sobre el tripartito -al que se opuso todo lo que pudo, presionando al ex presidente autonómico Pasqual Maragall para que renunciara a formarlo- no es en absoluto nuevo. Hace exactamente dos años ya opinó que "gobernar con los separatistas de ERC nos ha pasado factura, y grave". Entonces, afirmó que el tripartito provocó una especie de reacción en cadena: socialistas catalanes "tratan de ser nacionalistas", esto hace que los nacionalistas moderados de CiU "se radicalicen" y que "los más radicalizados anteriormente", en referencia a ERC, "se echen al monte". Y hoy ha recordado que él ya lo había advertido, y que predicó en el desierto:
"Cuando yo decía que Cataluña caminaba hacia la independencia me decían que era un nacionalista español enloquecido, que adónde iba yo con estas exageradas posiciones: ahí lo tenemos".
Bono ha añadido que el "invento generalizado del independentismo" es relativamente nuevo, "de hace cuatro o cinco años". Ha explicado que en su época de ministro de Defensa, de 2004 a 2006, la Generalidad de Cataluña hizo una encuesta en la que preguntaba en qué posición de sus prioridades se situaba el Estatuto, y que este "se encontraba en el lugar 24". "¿Y a cuántos catalanes les interesaba aquella fiesta identitaria que montó Maragall? Al 0,4%", ha relatado a modo de ejemplo.
Se presenta a España como la madrastra
El ex dirigente socialista no ha cargado solo contra el PSC, sino también contra ciertas opiniones que se mantienen en Cataluña. "Se ha llegado a esto porque se presenta a España como la madrastra, que los males de Cataluña vienen porque España les roba. Y hay mucha gente de buena voluntad que cree que los males de Cataluña, el paro y los problemas sociales, se arreglarán con la independencia", ha explicado.
Bono también ha aportado soluciones. En primer lugar, ha dejado claro que hay que "respetar" la Constitución. "En un Estado de derecho lo único digno de ser respetado es el imperio de la ley, no los sentimientos de unos y otros", ha afirmado. Y, a la vez, se ha mostrado a favor de reformar el texto constitucional, para solucionar el "disparate" del "café para todos". "Hay que modificar la Constitución y, de los 17 problemas que tenemos, a ver si quedan dos y somos capaces de resolverlos", ha pedido.
Finalmente, Bono ha reclamado a los partidos políticos de ámbito nacional "grandeza patriótica" para abordar la cuestión, porque el auge del independentismo en Cataluña es un asunto fundamental que "hemos de resolverlo sin pensar sólo en ganar las elecciones".