Borrachos de éxito

García-Margallo lo ha verbalizado. El éxito de la cadena humana es inapelable y no hay que minimizarlo. El propio ministro ha dicho que habrá que reflexionar sobre la posibilidad de reorganizar el Estado. Círculos gubernamentales piensan que Artur Mas y CiU utilizarán el éxito de la movilización para negociar mejoras en financiación, cultura, lengua y competencias. Con este presupuesto, parece ser que el Gobierno se está poniendo manos a la obra para establecer cuáles pueden ser los escenarios de negociación.

Están equivocados. No hay negociación posible. Llega tarde. El nacionalismo catalán está borracho de éxito y no tiene intención de negociar nada que supondría poner el Estatuto encima de la mesa. La única negociación que quieren plantear es el amparo del Estado a una consulta secesionista. Sólo quieren la independencia. El consejero de la Presidencia, Francesc Homs, lo ha dicho muy claro aunque de una forma chusca "hemos hecho algo muy gordo".

Bien haría el Gobierno central, y los partidos contrarios a la secesión, en centrar el debate en desmontar el mito de la Cataluña independiente

Ahora, toda la oficialidad con el apoyo mediático, público y subvencionado, se esmerarán en dar cobertura al relato mítico en el que está instalado el movimiento separatista potenciando los aspectos históricos –la interpretación sui géneris de los hechos de 1714-, y económicos –que convierten la independencia en una suerte de paraíso terrenal en el que no existirá el paro y el bienestar social quedará más que preservado-. Su único objetivo: calentar motores para la consulta que tienen prevista para 2014.

Con fecha y pregunta garantizadas, Artur Mas podrá presentar unos presupuestos que tendrán el apoyo de ERC. No hará falta que estos grandes números sean realistas, solamente tendrán como misión cubrir las necesidades hasta la consulta. Si el Gobierno central intenta poner trabas será como un regalo venido del cielo. La artillería nacionalista disparará fuego graneado contra el Ejecutivo de Rajoy que será acusado de todos los males que afectan a Cataluña.

Sin embargo, el Ejecutivo tiene todavía elementos para forzar una negociación a la que Mas se resistirá como gato panza arriba porque está preso de Oriol Junqueras. Estos elementos se concretan en los pagos del Fondo de Liquidez Autonómico que necesita el Gobierno autonómico para pagar nóminas y proveedores. También, el PSOE haría bien en cerrar filas con el PSC. Quizás la Fiesta de la Rosa sea un buen momento para unificar criterios entre Rubalcaba y Navarro. En ciernes, un encuentro con Mas.

Pero, además, de este tira y afloja bien haría el Gobierno central, y los partidos contrarios a la secesión, en centrar el debate en desmontar el mito de la Cataluña independiente. Con datos, argumentos, que pongan en evidencia las mentiras del mito soberanista. Datos y argumentos que movilicen a los catalanes contrarios que miran estupefactos como los independentistas están movilizados al máximo y ellos, simplemente, estupefactos.