Oficinas centrales de grupo Simon
Simon, el titán del material eléctrico que intenta recuperar su brillo
"Pese a los recientes problemas experimentados, mantiene unos activos valorados en 300 millones y un patrimonio neto cercano a esa misma cifra"
El grupo barcelonés Simon, fabricante de enchufes y material eléctrico, es una potente corporación con una trayectoria de casi 110 años. Van transcurridas ya cuatro generaciones después del fundador y el capital permanece, de forma invariable, en manos de la misma saga.
Las distintas ramas que componen la descendencia ocupan los nueve puestos del consejo de administración, bajo la presidencia de Sergio Vives Simón. La gestión está encomendada a un ejecutivo externo, ajeno a la estirpe. Así viene ocurriendo desde hace décadas.
Simon figura entre las pioneras que redactaron protocolos familiares destinados a profesionalizar al máximo la dirección. Dicho documento también prohíbe que los propietarios trabajen en el seno de la sociedad. Así, de paso, pueden dedicarse por entero a sus propios quehaceres y mantienen un perfil periodístico nulo.
La compañía arrastra una fase de estancamiento que se prolonga desde la crisis de 2007. Por aquel entonces, cuando la burbuja inmobiliaria alcanzó sus máximas dimensiones, logró la cima de su desarrollo con unas ventas de 310 millones y un beneficio neto de 35.
Tras el estallido del globo, se sumió en una pertinaz fase de decaimiento y expedientes de regulación de empleo, que perduró durante un sexenio. Luego sobrevino una recuperación lenta pero sostenida, que se truncó el año pasado.
En ese ejercicio, la entidad apenas alcanzó los 275 millones de facturación y registró pérdidas por 15,2 millones. La cara más favorable del balance la mostró el flujo de caja, que fue positivo en 10 millones.
GRUPO SIMON EN CIFRAS
| Año | Ventas | Resultado |
| 2024 | 275 | -15,2 |
| 2023 | 306 | 1,9 |
| 2022 | 327 | 6,3 |
El resultado adverso no fue óbice para que los socios de la casa recibieran su recompensa habitual. La junta acordó el reparto de un dividendo de 6 millones, la misma cantidad que en el periodo precedente. En los últimos doce años, ha distribuido entre sus propietarios más de 60 millones por el concepto transcrito.
El conglomerado es un coloso industrial. Se constituyó en Olot (Girona) en 1916, por iniciativa de Arturo Simón Vivet, natural de Palafrugell. El emprendedor, dedicado a las instalaciones industriales, fundó un taller para manufacturar portalámparas, ante la falta de suministros provocada por la Primera Guerra Mundial.
Aquel negocio forma hoy una trama de diez factorías, sitas en otros tantos países. Asimismo, comercializa sus artículos en casi un centenar de mercados. Su perímetro incluye una treintena de filiales, con una plantilla total de 3.150 empleados. Un tercio de ellos trabaja en las fábricas de su pertenencia en China.
La empresa manufactura artículos eléctricos y electrónicos, aparatos de iluminación, dispositivos de control de accesos y video-vigilancia, amén de sistemas de conexión de voz, datos y multimedia, y canalizaciones.
Pese a los recientes problemas experimentados, y tras más de un siglo de actividad fructífera, mantiene unos activos valorados en 300 millones y un patrimonio neto cercano a esa misma cifra. Ambos guarismos reflejan la extraordinaria solidez y el rendimiento histórico que le han caracterizado prácticamente desde su nacimiento.