José Elías (49), empresario catalán: “Hay muchos que están atrapados, la jubilación es un coste inasumible que te impide retirarte en paz”

El empresario catalán José Elías, analizando la realidad del tejido empresarial español, ha identificado una profunda y dolorosa problemática que afecta a la generación de propietarios de negocios que se acerca a la edad de retiro: el proyecto de toda una vida se convierte, paradójicamente, en una “jaula de oro”.

Elías destaca que existen empresarios en España trabajando con 70 años, y enfatiza que la razón de esta permanencia no es el gusto, sino la desesperada necesidad: “Es porque están atrapados”.

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La trampa se cierne sobre aquellos propietarios de Sociedades Limitadas (SL) que han generado puestos de trabajo. El empresario hace hincapié en que para una persona que opera como autónomo sin personal a su cargo y que está sola, la jubilación es un proceso relativamente sencillo: puede simplemente bajar la persiana para retirarse.

Sin embargo, la legislación española impone una carga mucho más pesada sobre el empresario que tiene empleados. En este caso, la ley obliga a liquidar la empresa. Esta obligación legal es la que genera el coste inasumible y la gran paradoja del sistema.

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Al liquidar la sociedad, el empresario debe asumir el pago de la indemnización por despido a toda su plantilla. Este requisito se traduce en un “coste de cierre altísimo” que es, sencillamente, “inasumible para muchos”.

Elías subraya la ironía cruel de esta situación: el empresario dedica 40 años de su vida profesional “creando empleo y riqueza”, y al llegar al final de su carrera, “ese mismo empleo te impide retirarte en paz”. El impacto financiero de esta liquidación puede ser devastador, pues el alto coste generado por el cierre “puede comerse los ahorros de toda su vida”.

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Este panorama deja al empresario con un abanico muy limitado de opciones, y ninguna de ellas resulta sencilla. Las salidas posibles para evitar la ruina patrimonial pasan por tres vías principales:

1. La necesidad de encontrar un comprador que esté dispuesto a tomar las riendas y continuar con la actividad del negocio.
2. La posibilidad de ceder la empresa a un familiar, siempre y cuando este familiar exista y esté dispuesto a asumir la responsabilidad y el riesgo de continuar con la gestión.
3. El camino más arriesgado: asumir el coste de cierre que implica la liquidación, poniendo en peligro el patrimonio personal acumulado durante décadas.

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En este contexto de escasas y difíciles soluciones, la compraventa de pymes se vuelve “tan necesaria”. Por ello, el experto ve en la adquisición y traspaso de negocios una solución inteligente y pragmática.

Por un lado, la venta garantiza que el empresario que se retira pueda obtener el valor que merece por su trabajo y el esfuerzo de toda una vida. Por otro lado, permite que otro más joven aproveche una estructura que ya está funcionando para seguir, haciéndola crecer y evolucionar. “Siendo realistas, por suerte o por desgracia,” el mecanismo de compraventa es la “forma más inteligente de garantizar que el esfuerzo de toda una vida no termine en una liquidación inevitable”, sentencia Elías.