La victoria de Trump en las elecciones generales del pasado 5 de noviembre provocó todo tipo de reacciones en Estados Unidos. Varios artistas estadounidenses decidieron pronunciarse abiertamente en contra del nuevo presidente electo; entre ellos la cantante Billie Eilish, una de las voces más influyentes del pop musical de la última década.
La noche de las elecciones y nada más conocerse el resultado, la cantante, que supera los 100 millones de seguidores en Instagram, colgó un post con un solo comentario: "Es una guerra contra las mujeres”.
Tanto Eilish como su hermano Finneas O’Connell, compositor y productor de todos sus temas, habían declarado que darían su apoyo a la candidata demócrata Kamala Harris en las elecciones, y en un vídeo dirigido a los votantes, ambos hermanos instaban a votar para “luchar por la protección de nuestra libertad reproductiva, por nuestro planeta y por nuestra democracia”.
Además de pronunciarse en redes sociales, Eilish quiso dar también su opinión ante el público. El día después de conocerse la victoria de Trump, la cantante aprovechó uno de los shows de su gira Hit Me Hard and Soft en Nashville para dejar clara su postura.
“La canción que vamos a tocar la escribimos mi hermano Finneas y yo hace muchos años. Trata sobre el abuso que existe en este mundo hacia las mujeres, sobre muchas de las experiencias por las que he pasado y por las que han pasado mujeres que conozco. A decir verdad, nunca he conocido a una sola mujer que no tenga una historia de abuso. Ni una”.
“Yo misma he lidiado con algunas cosas y también se han aprovechado de mí. Se cruzaron mis límites, por decirlo así”, continuó Eilish, que acabó su discurso haciendo alusión a las acusaciones por abuso sexual que pesan contra Donald Trump, y por las que el pasado año fue encontrado culpable: “ahora alguien que odia a las mujeres profundamente está a punto de ser el presidente de Estados Unidos”.
La voz de la generación Z
A pesar de la honestidad con la que se dirigió a sus fans en el concierto, Eilish nunca ha querido entrar en detalles sobre su vida personal. Es la decisión que ha tomado una chica de apenas 22 años que saltó a la fama con tan solo 14 a raíz del éxito del single que grabó y compuso junto a su hermano, Ocean Eyes.
Diez años después –sin cesar la colaboración con su hermano, y sin abandonar su propia casa como estudio– Billie Eilish ha conseguido hacerse un nombre en la industria musical con nueve premios Grammy, los cuatro primeros conseguidos en 2019 con su álbum debut, y dos premios Oscar por los temas No Time to Die, canción de la última película de James Bond, y What Was I Made For?, fenómeno de la BSO de Barbie.
Su estilo irreverente y nada convencional, que hibrida géneros (pop, hip-hop, trap e incluso jazz) e incluye letras que tratan sobre temas tan reales como la depresión, la ansiedad o la soledad, convierten a Eilish en la antítesis de la estrella del pop adolescente y la alejan de toda categorización. Aun así (o gracias a ello), su voz ha conseguido convertirse en el icono de toda una generación.
Un recorrido por su biografía
La editorial Dibbuks ha editado una monografía titulada Billie Eilish: la bad guy del pop (en alusión al título de uno de sus singles más conocidos, “Bad Guy”), en un formato poco habitual, singular como la propia Eilish: mitad novela gráfica y mitad cómic, el libro narra el recorrido de la cantante desde sus inicios hasta hoy.
Con ilustraciones de Paolo Moscheni y textos de la periodista musical Valeria Sgarella, la historia relata los primeros éxitos de la cantante y también algunas anécdotas curiosas, como su obsesión enfermiza por Justin Bieber o el amor por su tarántula “Cools”, pasando por cómo el imaginario del cine de ciencia ficción y de terror han definido su música (y han revolucionado el género pop)... se trata de un imprescindible para los fans de la cantante, pero también para aquellos que estén interesados en conocer la trayectoria de una de las artistas más influyentes de la última década.
Decir lo que se piensa
Porque el fenómeno Billie Eilish va más allá de la música. La cantante se ha involucrado en numerosas causas sociales, desde el activismo medioambiental, la defensa de los derechos de los animales y el veganismo, hasta la visibilización de trastornos relacionados con la salud mental.
Sus letras a menudo expresan estas inquietudes (la canción Your Power cuestiona la superioridad masculina y el abuso hacia las mujeres); también lo hacen sus acciones: Eilish fue una de las cantantes que promovió la creación de 'espacios verdes' en sus conciertos, donde sus fans podían informarse sobre varias ONG, recargar sus botellas de agua e incluso registrarse para votar.
Billie Eilish: la bad guy del pop es una historia pensada para aquellos lectores jóvenes y adolescentes interesados en conocer la biografía de una de las artistas más influyentes de la década, una adolescente que revolucionó el panorama musical y que hoy sigue siendo un ejemplo de autenticidad, una artista que no tiene miedo a decir lo que piensa ni a demostrar quién es dentro y fuera del escenario.