Pocos espectáculos naturales son más bellos que disfrutar de una noche clara y estrellada en la que observar el firmamento y tratar de desentrañar los secretos que guarda esa inmensa bóveda oscura.
Afortunadamente, en Cataluña hay numerosos lugares en los que pasar la noche sin apenas contaminación lumínica. De hecho, muchos de ellos cuentan con el sello Starlight con el que la Unesco avala que se trata de sitios donde la luminosidad y transparencia del cielo es idónea para la observación astronómica.
Observatorios en Cataluña
Más allá de tumbarse o recostarse cuando el sol se oculta y observar el cielo oscuro --si se hace algo así, no hay que olvidar llevar ropa de abrigo y asegurarse de que será una noche despejada--, merece la pena visitar los observatorios que hay repartidos por la geografía catalana.
En ellos será posible aumentar los conocimientos sobre astronomía, que bien se pueden completar con visitas al Planetario de CosmoCaixa que está en Barcelona (cerca del Tibidabo) o al Museo de las Ciencias Naturales de Granollers, donde también hay un planetario; sin duda dos citas ineludibles para los amantes de la observación nocturna.