La estrella de Belén vuelve a hacer de GPS de Melchor, Gaspar y Baltasar. A lo largo de la historia se ha elucubrado sobre qué era ese haz de luz que guió a los Reyes Magos hasta el portal donde nació Jesús, según la tradición cristiana. Las teorías son diversas, podría ser un cometa, un eclipse o una supernova, pero la triple conjunción de Kepler es la más aceptada.
En 1603, Johannes Kepler observó la conjunción de Júpiter y Saturno en la que los planetas se alinean, debido a sus órbitas, alrededor del Sol. Este fenómeno astronómico habría dado lugar a la leyenda de la estrella de Belén que orientó a los tres monarcas. El astrónomo alemán calculó que se observó por primera vez en el año 7 antes de Cristo, lo que supondría un error en el recuento del calendario gregoriano partiendo del nacimiento de Jesús.
Los reyes de Oriente vuelven con su particular GPS
La famosa estrella, provocada por la alineación teorizada por Kepler, volverá a verse en el hemisferio norte del 16 al 25 de diciembre. Este fenómeno fue observado por última vez durante la Edad Media, en el año 1226, cuando se percibió la ilusión óptica que producen Júpiter y Saturno, como si fueran una sola estrella.
El particular GPS de los Reyes Magos no volverá a observarse hasta 2080, según los expertos. Esto convierte a la Navidad de 2020 en una oportunidad única de ver esta falsa y mágica estrella de oriente.