Lo advierte Paco Umbral (Francisco Alejandro Pérez Martínez. Madrid, 1932-Boadilla del Monte, 2007) en su Diccionario para pobres (1977) y republicado por Ediciones Irreverentes (2001): “Un diccionario es un coñazo que no se lo salta un pobre”. Confesó que quería hacer el Diccionario ideológico de don Julio Casares, pero ya estaba hecho, y “los pobres son poco ideológicos”.

No quiso engañar a nadie y se autorretrató. Umbral.- “Dícese del señor rico que escribe un diccionario para pobres”. Su primera definición fue: ABC.- “Periódico que no leen los pobres”. Desde aquel siglo XX de su primera publicación hasta hoy, pocas cosas han cambiado para los pobres. Como puede comprobarse este verano sin vacaciones y con los próximos gastos de los inicios del curso escolar.  Hambre.- “Cosa a la que son muy aficionados los pobres. Los pobres siempre están pasando hambre”.

"Hipótesis de trabajo"

Alegría y consuelo veraniego ha sido el Balompié.- “Futbol para los pobres, es una ocasión de salir huyendo de la parienta y pasar dos horas gritando como si estuvieran haciendo la lucha de clases aunque no la hagan”.

Según el autor, “un diccionario es una novela a la que sobran palabras y le faltan personajes”. Uno de sus  personajes, B.B.- “Francesa ligera que se hizo famosa en el cine galo, llegando a enseñarlo todo o por partes […] A los pobres les gustaban más la Gina o la Loren, porque tenían más donde agarrarse”. Pero toca conformarse con la Gachí.- “Los pobres dicen gachí y los ricos madame. Está siendo sustituida por la jai. Jai.- “Término que denomina, en argot quinqui, a la mujer joven y se supone que hermosa”. Y deja sin aliento la visión de la Tía buena.- “Dícese de la que efectivamente lo está. Para los pobres, suele ser siempre una hipótesis de trabajo, un problema de fe y una referencia de los sentidos más espirituales, como la vista. Luego el que se la tira es otro”.

Paco Umbral, en una imagen de 1992 WIKIPEDIA

Anima algo la Coña.- “Dícese de la manera que tiene el  pueblo español, o sea los pobres, de recibir, comentar y vivir la doctrina política que se le imparte en los discursos y publicaciones oficiales”. Distinto de Coñazo, Coño o Chumino.- “No es sinónimo de chocho, es de importación arábigo andaluza”.

¿Y la Nocilla?

Calor, siesta y fiesta incitan a Fornicar.- “Sólo fornican los intelectuales y algunos burgueses ilustrados… Los pobres, los obreros no cualificados, el lumpenproletariado, las meretrices… lo que hacen es follar”. Diferente, a su vez, de Jodienda.- “Voz, sin duda, de origen pobre [….] Los ricos no dicen jodienda sino romance, flirt, idilio, tonteo, adulterio y otras cosas así de cursis”.

Antes de que llegue el otoño, Hatchits.- “Los pobres, […] estornudan de frío, y los ricos estornudan a base de polvos en la pituitaria”. Dividendo.- “El pobre ha inventado el trabajo, el rico ha inventado el dividendo”.  Nocilla.- “Una merendilla que se da a los niños pobres que no pueden tomar mantequilla… Lo cual les genera mucho odio de clase”. Horda.- “Dícese de todo obrero que se presenta en la cabina de contabilidad del taller a pedir un aumento”. Así que siempre y únicamente queda el Garbeo.-  “Cosa que se dan los pobres cuando no tienen otra cosa que darse”.