Lluvia de críticas a las propuestas de ampliación del Hospital Clínic Barcelona, el mejor de Cataluña. El Colegio de Arquitectos (COAC) ha alertado de que las propuestas actuales de traslado a la Escuela Industrial "desfiguran" este recinto modernista. Por su parte, los vecinos de Barcelona han alertado de que se les está orillando del proceso.
Todo ello ha sido denunciado hoy jueves, 10 de septiembre, en la presentación de la Plataforma Un nou Clínic és possible, salvant el recinte de l’Escola Industrial. En la jornada, el ente colegial, la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (Favb) y las asociaciones de residentes del Eixample han puesto peros al proyecto de fondfo de trasladar la ciudad sanitaria al conjunto de edificios modernistas. Colegio y asociaciones comunitarias han tendido la mano a la gerencia del Clínic y a las tres administraciones implicadas: Generalitat de Cataluña, Diputación de Barcelona y ayuntamiento, sin ahorrar críticas al plan maestro del complejo médico.
"Desfigura un monumento..."
Una de las más duras con las intenciones del Clínic de mover sus unidades a la Escuela Industrial ha sido Sandra Bestraten, presidenta de la demarcación de Barcelona del Colegio de Arquitectos de Cataluña. Según la profesional, el proyecto actual tal y como está planteado "desfiguraría" el conjunto monumental, eliminaría espacio para peatones y zona verde y eliminaría equipamientos deportivos "de referencia". Subraya el Colegio que la obra acabaría con un hospital "impermeable" situado demasiado lejos del actual.
Por su parte, los vecinos también han alertado de que nadie les consultó. Se ha referido a ello Ana Menéndez, presidente de la Favb. Según la activista, los impulsores del proyecto "no han contado con la participación vecinal". Menéndez ha agradecido al Clínic su disposición a hablar con los residentes, pero ha cargado contra las tres administraciones implicadas. "Siempre que les hemos consultado han contestado con evasivas", ha deslizado.
Blindar la Escuela Industrial
Por todo ello, la plataforma plantea cinco medidas antes de que se pacte el plan urbanístico. La primera es difundir el valor patrimonial de ambos recintos y reivindicar el eje peatonal de la calle Rosellón; blindar la Escuela Industrial con la etiqueta de Bien Cultural de Interés Nacional --lo que impediría su derribo o las obras sin el visto bueno del Departamento de Cultura--; garantizar la permabilidad de este complejo educativo y deportivo; agotar las alternativas a la nueva ubicación y realizar estudios de "viabilidad, sostenibilidad, movilidad y necesidad" de la ampliación.
Todo ello supone una enmienda a la totalidad al necesario proyecto de ampliación del Clínic, que nadie cuestiona habida cuenta de la antigüedad de las instalaciones: se inauguraron en 1906. El conflicto radica en el cómo, ya que el Clínic ha diseñado y negociado reabrir en la Escuela Industrial, y ahora una plataforma profesional y vecinal lo rechaza. Al menos en las condiciones actuales.