El mundo está plagado de museos y exposiciones protagonizados por los más insólitos y sorprendentes objetos. Por ejemplo, Nueva Delhi cuenta con un museo dedicado íntegramente al inodoro y en Osaka decidieron abrir un espacio donde los fideos instantáneos acapararan toda la atención. Ante esta situación, no es de extrañar que Los Ángeles (Estados Unidos) haya optado por inaugurar el primer museo del selfie, cuyo objetivo es explorar la cultura de esta tendencia fotográfica en auge.
Lejos de abanderar una crítica social sobre el impacto de los smartphones en nuestra rutina diaria, The Museum of Selfies ha desarrollado un recorrido interactivo por la historia, el arte y la tecnología del selfie. Y no solo eso, los aficionados a esta técnica podrán poner en práctica sus mejores poses en algunos cuartos especiales habilitados para la ocasión.
El selfie cumple 40.000 años
Los visitantes pueden poner en práctica su dominio del palo selfie / CG
Ubicado en la pequeña localidad de Glendale, en Los Ángeles, este recinto temático no quiere atraer únicamente a los curiosos y amantes de la diversión. Como bien han explicado los propietarios, el propósito es ahondar en esta nueva cultura, símbolo de la sociedad moderna que parece no tener un final próximo.
De hecho, más de un millón de selfies se publican a diario en todo el mundo, de los cuales el 14% presenta algún retoque digital. La edad media del fotógrafo ronda los 24 años, mientras que el género femenino se muestra mucho más abierto a este tipo de autorretratos.
Arte, tecnología y reflexión
Algunas obras ya consagradas han sido adaptadas para la ocasión / CG
El museo, que por el momento estará abierto durante los próximos dos meses, no solo ha preparado un recorrido por la historia del selfie. Una de las exposiciones más visitadas está dedicada a todas aquellas personas que han perdido la vida durante la búsqueda de la imagen perfecta. Un punto de reflexión que abre los ojos al lado oscuro de dicha cultura.
Además, varias de las estancias lucen con orgullo auténticos hitos del género, como el selfie del mono negro de David Slater, y obras de arte con nombre propio. Rob Vital, Joseph Nowak, Matt Elson, Michele Durazzi y los creadores del museo, Tommy Honton y Tair Mamedov, son solo algunos de los artistas que han cedido sus trabajos al ya mítico The Museum of Selfies.