Santorini, posiblemente la isla más bonita del mundo

Enciclopedia de mitos y fábulas, retrato del mar Egeo, escala inevitable de atardeceres hipnóticos, una ventana a la prehistoria y una fotogenia que luce ante la cámara… Nacida del vientre de un volcán y moldeada por el azote del viento y del mar, esta isla presume del magnetismo que comparte con el mito de la Atlántida.

La fisonomía de esta isla griega es la que más se asemeja al paisaje descrito por Platón. Sea cierta o no la leyenda, Santorini es en sí misma una colección de espectaculares imágenes que la encumbran como la reina de Instagram. Es difícil encontrar un lugar en el mundo que ofrezca un paisaje de tanta grandiosidad, sobre todo cuando el sol de la tarde comienza a esconderse. Las casas blancas y las ermitas con cúpulas azules son el copyright de esta isla griega en forma de media luna que ofrece puestas de sol de alto standing. 

Una maravilla geológica

Menos animosa que la archiconocida Mykonos, esta isla mediterránea se levanta sobre la enorme caldera de un volcán con pueblos que se asoman a colosales acantilados donde el mar golpea con fuerza mientras playas de arena blanca, roja o negra mecen sus aguas de un azul profundo.

Esta perla del Egeo, uno de los destinos más populares del mundo, ofrece infinidad de tesoros. La isla en sí es una maravilla geológica. Las casas blancas construidas con roca de lava se aferran a las laderas de su escarpada orografía y ofrecen una espectacular visión.

Vuelo directo desde Barcelona

Santorini está formada por pequeños pueblos con paredes encaladas en blanco que hacen resaltar aún más el azul de las grandes cúpulas. Tiene una fuerte identidad propia, distinta del resto de las islas griegas.

Está conectado por vuelos directos con otras ciudades de Grecia, como Atenas o Tesalónica. También recibe vuelos procedentes de las principales capitales europeas. Vueling conecta Barcelona y Santorini con cinco frecuencias semanales y con precios a partir de 74,99 euros por trayecto.

Fira

Situada sobre un acantilado a lo largo de la costa oeste de la caldera a una altura de 260 metros sobre el nivel del mar, ofrece una espectacular vista del volcán sumergido. El carácter religioso de Grecia ha influido en las numerosas cúpulas azules de sus ermitas.

Desde el pequeño puerto de Skala, donde fondean los cruceros, se accede a ella tras un pronunciado ascenso a pie o a caballo o en burro por un empinado y sinuoso camino escalonado (588 escalones) o en el teleférico.

Fira es además el principal centro turístico, punto de origen del transporte que la conecta con el resto de la isla. Es también el lugar donde se concentran la mayoría de tabernas, bares, restaurantes y hoteles. Sus principales reclamos son el Palacio de Gyzis, el Museo Arqueológico de Thira, el Museo Prehistórico o el Museo Folklórico.

Oia

Oia es considerada por muchos como el lugar más encantador de esta isla, ya que ofrece magníficas vistas del atardecer. Las casas y cles pavimentadas bordean la caldera. Este pueblo tiene un ambiente tranquilo y se ha convertido en un centro cultural, con varias galerías de arte griego, joyerías y tiendas de souvenirs.

Construido en el borde de la Caldera, se caracteriza por sus casitas pintadas en blanco con puertas y ventanas azules excavadas en la roca, villas con terrazas y balcones que están construidas sobre el acantilado y las típicas iglesias con cúpulas azules.

Oia ofrece también interesantes atracciones culturales como las ruinas de una antigua fortaleza veneciana y la biblioteca del Museo Marítimo

Akrotiri

La atracción más importante de la isla de Santorini está justamente ubicada aquí, en Akrotiri, donde se descubrió un antiguo asentamiento minoico. Su buena conservación hace que incluso se la compare con Pompeya, aunque a diferencia de la antigua ciudad romana no se encontraron restos humanos.

Situado en la zona sur de la isla, es uno de los yacimientos arqueológicos con restos prehistóricos más importantes del Mediterráneo, ya que en él se han encontrado restos arqueológicos de principios de la Edad de Bronce. Se trata de una ciudad antigua subterránea que quedó enterrada tras la erupción del volcán de Santorini.

Perissa

Perissa, en el lado sur, es una pequeña y pintoresca ciudad costera, con una de las playas de arena de lava negra más bellas y famosas de la isla, con aguas profundas de color azul oscuro. Las ruinas de la antigua Thera se encuentran en una colina y ofrecen vistas más impresionantes. Cerca se encuentra Kamari, un popular balneario y la playa de Perivolos.

Los vientos de esta parte de la isla hacen que los deportes acuáticos sea una de las mejores formas de pasar el día. La riqueza del fondo marino convierte este increíble rincón en el lugar idóneo para practicar el snorkel.

La Playa Roja

Playa Roja se encuentra en al sur oeste de la isla en una cala al reparo de un escarpado acantilado cercano a la ciudad de Akrotiri. Lo más llamativo de esta playa es su insólito y fascinante color rojo, que se debe al origen mineral de sus rocas y arena que provienen de sedimentos volcánicos, mayoritariamente de color rojo y negro que se debe a la presencia de hierro en la composición tanto de las rocas del acantilado como de la arena de la playa.

Su nombre original es Kokkini Paralia y se encuentra bajo un escarpado acantilado cercano a la ciudad de Akrotiri. Hay tabernas construidas en la base de la roca, justo más allá de la playa. Las relucientes aguas le invitan a darse un baño, hacer snorkel o simplemente nadar.

Imerovigli

Imerovigli es un fascinante pueblo ubicado en la parte occidental de la isla a solo dos kilómetros al norte de Fira. Construido en el acantilado al borde de la Caldera, ofrece una fantástica vista de la bahía y del volcán, especialmente al atardecer.

El pueblo se encuentra ubicado a 300 metros sobre el nivel del mar y domina la isla entera. Surgió como un puesto de vigilancia que gozaba de una posición estratégica desde la que podía controlar el ataque de los piratas.

Desde Imerovigli se puede contemplar la famosa Roca de Skaros, restos de un castillo veneciano que se utilizaba para vigilar y prevenir.

Puerto de Ammoudi

La bahía de Ammoudi es una pequeña cala situada justo debajo de Oia. En la base de los acantilados que se elevan hasta la ciudad de Oia, este puerto destaca sobre las aguas turquesas.

Ammoudies es muy popular por sus pintorescas tabernas griegas excavadas en las rocas que sirven la pesca del día a solo unos metros del mar. Desde su puerto se puede practicar snorkel o navegar en velero hasta el volcán para nadar en las aguas termales.

Pyrgos

Se encuentra en el punto más alto de la isla y las vistas desde su mirador son espectaculares. En la parte más alta del pueblo se encuentra una fortificación de carácter veneciano. Pequeñas calles serpenteantes de casas encaladas en blanco marcan el acceso hasta el castillo.

Se suele decir que tiene más iglesias y ermitas que casas. Muchas de ellas son privadas, aunque algunos propietarios permiten visitarles y entrar en su interior para conocerlas.

Los productos de Santorini

La cocina de Santorini está basada lógicamente en la gastronomía griega. La moussaka, una lasaña de berenjenas, el souvlaki, muy parecido a la brocheta, el queso frito o la langosta fresca son los productos más típicos. Postres como el baklava, hojaldre con miel y, por supuesto, el yogur griego son de talla internacional.

En la isla se producen vinos desde hace más de 3.500 años. Crecen variedades de uvas autóctonas extremadamente resistentes que se remontan a la antigüedad. La más utilizada es la assyrtiko, muy similar a la uva Verdejo, aunque más frutada y menos ácida. Se trata de una uva resistente a la philoxera gracias al suelo volcánico de la isla,