Siete planes para descubrir Álava

Naturaleza a cada paso, entorno verde, villas fortificadas con trazado medieval, cuevas prehistóricas, santuarios, ermitas románicas, castillos y torres, palacios, playas con bandera azul, cultura y tradición en cada esquina, una gastronomía única y el mejor vino.

Todo eso ofrece Álava, un lugar lleno de experiencias únicas para ver, recorrer y disfrutar.

Vitoria-Gasteiz

La ‘Green Capital’ amable, cómoda y diseñada para vivir con todo a un paso. Incluyendo su Anillo Verde, el perímetro de la ciudad formado por seis grandes parques que podrás recorrer a pie o en bicicleta. En uno de ellos, Salburua, disfrutarás de varias lagunas que, gracias a su privilegiada situación en un paso migratorio, permiten avistar aves, ciervos y otros animales entre los humedales.

Vitoria-Gasteiz cumple su décimo aniversario como Capital Verde Europea y presume también de certificación internacional Biosphere Responsable Tourism como destino turístico sostenible.

Otro de sus tesoros es la Almendra Medieval, uno de los cascos históricos mejor conservados del norte de España, y la Catedral de Santa María y su original programa de visitas ‘Abierto por obras’. Este programa, al que recientemente se ha incorporado la realidad virtual, aprovecha los largos trabajos de restauración del templo  para que turistas y amantes de la historia conozcan la historia de su construcción y los orígenes de Vitoria-Gasteiz.

Más de un millón de visitantes han recorrido ya sus naves y atrio, y novelistas como Ken Follett, Toti Martínez de Lezea y la vitoriana Eva García Saenz de Urturi se han inspirado en la Catedral para narrar las historias de sus libros. De hecho, hay rutas temáticas por la Almendra basada en leyendas, fantasmas o el bestseller de esta escritora ‘El silencio de la ciudad blanca’.

Ayala

Conocida por sus montañas y valles con sus suaves laderas cubiertas de pastizales, bosques y prados, esta comarca alavesa combina una desbordante naturaleza, un rico patrimonio histórico y artístico, y una oferta enogastronómica muy interesante con el txakoli (vino blanco) y el queso como elementos centrales.

En esta comarca vierte sus aguas el salto del Nervión, la caída de agua más alta de España con más de 200 metros. Podemos acercarnos a este espectacular entorno desde arriba, pero también desde abajo a través de la nueva senda verde de Delika. El plan se completa con una visita a la villa medieval de Artziniega para recorrer sus calles, descubrir sus palacios y visitar sus museos.

Destacan el Museo Etnográfico y el original Taller Museo Santxotena. ¿Te apetece conocer la obra de este discípulo de Jorge de Oteiza de la mano del propio autor? Una experiencia única y diferente. Otros imprescindibles: acercarse a la historia en el Conjunto Monumental de Quejana y visitar las bodegas de txakoli y queserías de la comarca.

Llanada

La comarca de Llanada Alavesa ha sido desde siempre tierra de encuentro y cruce de caminos. Quizás por ello podemos encontrar hoy en día algunas de las iglesias más interesantes y curiosas de todo Álava. Alaitza, Gazeo, Añua o Estíbaliz son algunos puntos imprescindibles para conocer el gran patrimonio cultural que nos hablarán de la historia de este territorio y de los acontecimientos que marcaron el devenir de esta tierra.

En Gazeo se asienta el pequeño templo románico de San Martín de Tours, donde lucen unas espléndidas pinturas murales del siglo XIV que fueron descubiertas en 1967 al retirar el retablo mayor. Muy cerca, en Alaitza, en el mismo municipio de Iruraiz-Gauna, encontramos la iglesia de Santa María de la Asunción, del siglo XIII, cuyas paredes lucen unas misteriosas pinturas rojizas que todavía están siendo objeto de estudio.

Añua protege la tercera «joya» de la comarca. En esta pintoresca y encantadora localidad, un simpático puente nos permite aproximarnos al magnífico ábside de transición del románico al gótico de la Iglesia de la Natividad de Nuestra Señora… Y la Basílica de Nuestra Señora de Estíbaliz, un enclave plagado de historia que conjuga la tradición con el mejor románico del País Vasco.

Para completar el plan dos ideas más: aprender cómo se elabora el queso Idiazábal en las queserías de la zona y, por supuesto, saborearlo; y visitar la villa medieval de Salvatierra para reponer fuerzas.

Montaña Alavesa 

Es uno de los rincones más desconocidos de Álava y un paraíso para las personas amantes de la naturaleza y el turismo activo. Senderismo, bicicleta, ecoturismo… muchos son los planes que nos esperan en esta comarca con dos escenarios principales: la vía verde del Ferrocarril Vasco-Navarro y el Parque Natural de Izki.

La primera propuesta es recorrer la vía verde del Vasco-Navarro tomando como punto de partida el Centro de Interpretación ubicado en Antoñana. El 31 de diciembre de 1967 el “trenico”, como se conocía a este ferrocarril, hacía su último viaje. Hoy es posible recorrer este antiguo trazado, reconvertido a vía verde, tanto a pie como en bicicleta; conocer sus antiguas estaciones; y descubrir pueblos y paisajes espectaculares.

El segundo must de la comarca es, sin duda, el Parque Natural de Izki. Una red de 15 senderos con diferentes grados de dificultad permite al caminante descubrir sus bellos parajes, observar su flora y su fauna, y apreciar las tradiciones y la cultura de los seres humanos que habitaron y habitan este territorio.

Varias rutas discurren por antiguos caminos que comunican entre sí los bellos pueblos de este espacio natural: Korres, Antoñana, Bujanda, Maeztu... Otras se internan en el extenso robledal.

Quienes tienen en las dos ruedas su pasión disfrutarán de las rutas marcadas de su centro de BTT. Rutas para todos los gustos y todas las piernas: sencillas con escaso desnivel y distancia, y complejas y técnicas que rozan los 100 kilómetros de longitud y más de 2.000 metros de desnivel.

Muy recomendable también pasear por las estrechas calles y pasadizos de la villa medieval de Antoñana. Una forma sencilla de ‘viajar’ en el tiempo. Este pueblo fue construido en la Edad Media y, como era costumbre en aquella época, lo rodearon de murallas para poder defenderla mejor.

Añana

Esta comarca nos brinda la posibilidad de visitar y conocer el Valle Salado, uno de los conjuntos arquitectónicos, paisajísticos, arqueológicos, geológicos e históricos más singulares del mundo. ¿Por qué? Porque el Valle Salado es uno de los ejemplos más representativos a nivel mundial de la historia de la sal

Quien se acerca por primera vez queda impresionado al observar en su paisaje unas estructuras de madera teñidas de color blanco. Son las salinas con sus eras, pozos, canales, sendas y almacenes.

Un excelente programa de visitas guiadas permite recorrer el interior del Valle Salado, conocer la sorprendente historia del lugar y aprender cómo se extrae actualmente una de las mejores sales del mundo. Muy recomendables son las catas de sal y la actividad ‘Salinero por un día’.

Para completar nuestro plan de día o fin de semana en Añana os proponemos conocer los castillos de Portilla (Portilla) y Lanos (Ocio), y recorrer uno de los caminos más bonitos de Álava: la Ruta del Agua (Zambrana).

Rioja Alavesa

Otra joya en Álava donde se juntan patrimonio, tradición, paisajes, gastronomía y, por supuesto, el mejor vino. El mejor plan para sumergirse en la cultura de estos caldos y viñedos es empezar por Laguardia. Esta villa medieval fue fundada en el siglo X como defensa del Reino de Navarra y conserva casi intacto su trazado medieval y murallas. Sus calles están repletas de espléndidos edificios medievales, renacentistas, barrocos y neoclásicos.

Laguardia está minada de bodegas y no te será difícil comprobarlo visitando los sótanos de algún establecimiento hostelero.

Podrás conocer el proceso de producción del vino en muchas de las visitas guiadas que se ofrecen en las bodegas de la comarca, algunas de ellas firmadas por arquitectos como Frank Gehry o Santiago Calatrava. Las opciones son casi infinitas: comida o cena entre viñedos; participar en una cata comentada con algunos de los mejores vinos del mundo; contemplar las estrellas…

Gorbeialdea

¡Aquí sí hay playa! Esta comarca es un paraíso para la práctica del ecoturismo, entre otras muchas cosas. La provincia de Álava cuenta con varias playas de interior reconocidas con bandera azul por la Unión Europea por la limpieza de sus aguas y unas instalaciones adecuadas para todos los públicos, incluidas las personas con discapacidad.

Como la playa de Landa, elemento central del parque provincial del mismo nombre situado en las orillas del embalse de Ullíbarri-Gamboa. Aquí puedes tomar el sol, disfrutar de un baño refrescante, pasear, practicar deportes acuáticos o, simplemente, relajarte.

Quienes buscan retos no pueden dejar de subir el monte Gorbea (1.481 metros), cumbre emblemática de Álava y Euskadi, y disfrutar de unas inigualables vistas.

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