Quirónsalud se mantiene a la vanguardia en la lucha contra el cáncer. El grupo hospitalario privado líder en España, que ya fue el primero en aplicar la terapia de protones o protonterapia, vuelve a ser pionero a la hora de combatir los tumores malignos con esta tecnología.
El Centro de Protonterapia de Quirónsalud está ubicado en Pozuelo de Alarcón (Madrid). Es el primero en el mundo en incorporar un novedoso sistema que mejora la precisión de esta técnica y minimiza todavía más los efectos secundarios al reducir el riesgo de irradiar tejidos sanos. Esta nueva tecnología, denominada sistema SDX y desarrollada por DYN’R Medical Systems, permite controlar y monitorizar el movimiento respiratorio de los pacientes.
El sistema SDX
El sistema SDX es particularmente efectivo a la hora de optimizar el tratamiento de determinados tipos de cáncer, como los de pulmón, mama e hígado, ya que incorpora la medición directa del volumen pulmonar.
“Para nosotros es muy importante incorporar esta nueva tecnología para controlar y monitorizar el movimiento respiratorio de los pacientes durante cada sesión, sincronizando el disparo del haz en el instante correcto, y mejorando en consecuencia la calidad y la eficacia de nuestros tratamientos”, ha explicado el doctor Alejandro Mazal, director de Física Médica del Centro.
Radioterapia avanzada
La terapia de protones es una opción de tratamiento radioterápico accesible hasta ahora en una treintena de centros en toda Europa y que llegó a España de la mano de Quirónsalud. Gracias a las propiedades físicas de los protones, la protonterapia es, en la actualidad, la técnica radioterápica más avanzada y segura para tratar determinados tipos de cáncer, como pediátricos, oculares o cerebrales.
Aplicados en dosis específicas, los protones pueden actuar con precisión en el interior de los tejidos, consiguiendo una mayor actividad antitumoral y generando un menor daño en el tejido sano.
Mínima radiación
Entre los múltiples beneficios que ofrece la terapia de protones destacan la mínima o nula radiación en los alrededores del tumor, una menor dosis total de radiación por tratamiento, la reducción significativa de riesgo de tumores secundarios y la mejora de la calidad de vida del paciente.
La tecnología que emplea, desarrollada por la empresa europea Ion Beam Applications (IBA) y denominada Proteus One, cuenta con la más amplia experiencia internacional. El sistema se basa en un acelerador de la familia de los ciclotrones, adoptado por el 70% de los centros que ofrecen esta terapia en el mundo.
La tecnología que emplea, desarrollada por una empresa europea, Proteus One,
Más efectiva que otras técnicas
La incorporación de esta técnica, sincronizada con este equipamiento, consigue ajustar la precisión de los tratamientos frente a determinados tumores, utilizando una monitorización respiratoria por espirometría, más efectiva que otras técnicas alternativas.
“Esto permite controlar la posición del volumen de irradiación en relación con el movimiento respiratorio y guiar la administración de los haces de protones de forma precisa, en tiempo real, evitando así que se irradien tejidos sanos no afectados u órganos vitales situados cerca del tumor”, explica el doctor Juan Antonio Vera, físico médico del Centro de Protonterapia Quirónsalud. Además, “el haz de protones se puede interrumpir de manera inmediata en caso de detectar un movimiento interno no deseado”, concluye el especialista.
Visita de la Reina Letizia
La puesta en marcha de esta tecnología ha coincidido con la reciente visita de la Reina doña Letizia, que el pasado viernes acudió al Centro de Protonterapia Quirónsalud, ubicado en Pozuelo de Alarcón (Madrid), para conocer cómo funciona el primer centro de la sanidad española en incorporar este tratamiento avanzado contra el cáncer. Acompañada por la ministra de Sanidad, Carolina Darias, la Reina recorrió las instalaciones junto a la doctora Marta Cremades, directora gerente del centro.
El Centro de Protonterapia Quirónsalud comenzó a tratar a sus primeros pacientes en diciembre de 2019, lo que supuso un hito histórico en la lucha contra el cáncer en España al convertirse en el primer centro en utilizar esta terapia a nivel nacional. Desde entonces han tratado a más de 250 pacientes, la mitad de ellos pediátricos.