En un futuro próximo, la movilidad será muy diferente a la que conocemos hoy. La preocupación por el porvenir del planeta y la lucha contra el cambio climático han despertado conciencias en lo que a la evolución del transporte se refiere. La empresa líder internacional en la gestión de autopistas, Abertis, se ha situado a la vanguardia por adelantar plazos en el objetivo de conseguir vías de comunicación más sostenibles y ecológicas.
La sostenibilidad será un factor innegociable en la transformación hacia nuevos modos de desplazamiento, en los que la digitalización y las nuevas tecnologías tendrán mucho que decir en la reducción del impacto medioambiental. La creciente preocupación por el porvenir de la humanidad afectará directamente a la transformación de carreteras, autovías y autopistas.
Retos y soluciones
Estos dos grandes desafíos, sostenibilidad y digitalización, son las bases del programa de innovación de ingeniería inteligente del Grupo Abertis, enfocado a encontrar soluciones que permitan que las autopistas se conviertan en un modelo de eficacia y sean tecnológicamente revolucionarias. Un transporte eficiente es fundamental para impulsar el desarrollo de la economía y el bienestar de una sociedad que aspira a que los viajes sean más cómodos y seguros.
El objetivo marcado por la UE de alcanzar en 2050 cero emisiones netas de gases de efecto invernadero ha intensificado la transición hacia nuevos prototipos de desplazamiento, debido a que el transporte es uno de los principales focos de contaminación. Encontrar alternativas para el futuro se ha convertido en un compromiso global.
Responder a las necesidades
La implicación de Abertis en este cometido suma ya seis décadas invirtiendo en ingeniería inteligente para dar respuesta a las necesidades que demanda la nueva movilidad y que permitirán que la autopista del futuro sea una realidad.
Para ello, el grupo apuesta por cuatro líneas de actuación: las soluciones para la movilidad integrada, el impulso de los vehículos conectados, la potenciación de los vehículos eléctricos y el desarrollo de herramientas sostenibles. La descarbonización reclama, entre otras cosas, llevar a cabo una transición de los coches de combustible hacia otros modelos de energía limpia. De ahí, la proliferación de vehículos que no contaminen.
Autopistas inteligentes
Una movilidad segura, eficiente y sostenible requerirá de unas infraestructuras que se muevan a la misma velocidad que los avances tecnológicos, como los que ya están experimentando sectores como el de la automoción.
El incremento de la población, especialmente en zonas urbanas, conllevará irremediablemente un crecimiento exponencial del tráfico, que generará un exceso de contaminación y de accidentes de circulación, además de un déficit de productividad a causa de los retrasos provocados por los atascos. Por todo ello, la necesidad de modernizar las vías rápidas impulsará autopistas inteligentes que produzcan menos emisiones, aumenten la seguridad y promuevan la movilidad integrada.
Proyectos de futuro
Abertis, referencia en gestión de infraestructuras de transporte por carretera, quiere ser parte de la solución a los problemas asociados al incremento del tráfico mundial. Para ello cuenta con Abertis Mobility Services, una línea de negocio que busca dar respuesta a todas las cuestiones que plantea la nueva movilidad.
Entre sus futuros proyectos destacan una mayor innovación tecnológica y mejorar las inversiones en programación de ingeniería inteligente en una clara apuesta por las infraestructuras viales conectadas, la movilidad autónoma y eléctrica, peajes sin barreras, nuevos sistemas de pago y la movilidad como servicio (MaaS). Incluso, la compañía ya está instalando en las autopistas puntos de recarga –‘electrolineras’- para vehículos eléctricos, habituales ya en Francia e Italia.
Inversión en tecnología
El parque automovilístico mundial roza ya los mil millones de vehículos en la carretera, cifra que se cuadruplicará en 2050. Son unos números inasumibles para una sociedad que aspira a fundirse con el entorno natural en un futuro no demasiado lejano. Estas previsiones exigen tomar una serie de medidas preventivas que reviertan el crecimiento del tráfico y la contaminación.
Las nuevas tecnologías (big data, Internet de las Cosas, machine learning...) serán imprescindibles para mejorar la gestión de las infraestructuras viales. Estar mejor preparados para abordar la movilidad del futuro posibilitará un mantenimiento de las autopistas más eficaz, una mejor gestión del tráfico, una importante reducción del impacto ambiental y, en definitiva, permitirá ofrecer un mejor servicio a los usuarios.