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Invertir en conocimiento, la gran asignatura pendiente
La Cámara de Comercio de España reclama reformas legislativas para impulsar la transferencia de las investigaciones universitarias a las empresas
28 enero, 2020 00:00En la actual sociedad postindustrial, cada vez más globalizada y competitiva, el modelo económico ha experimentado un cambio completo que traslada la principal actividad productiva a otros ámbitos. El desarrollo de la tecnología, de la información y la comunicación han permitido mejorar la productividad. Sin embargo, también se han planteado nuevos retos: ¿Cómo adquirimos, codificamos y transmitimos el conocimiento? Y, una vez resuelto esto, ¿Cómo convertimos la información en riqueza?
La era de la información requiere de una nueva lógica de la economía en la que los modelos teóricos deben estar centrados en la obtención de conocimientos y en la transmisión de estos, es decir, en la transferencia tecnológica. Con este propósito, la Cámara de Comercio de España, a través de la Comisión Universidad-Empresa y en colaboración con el despacho de abogados DWF-RCD, ha elaborado un informe en el que presenta las conclusiones del análisis profundo Avanzando hacia la economía del conocimiento. Se trata de un estudio en el que también se proponen un conjunto de reformas legislativas para impulsar la colaboración entre universidad y empresa para mejorar la competitividad de la economía española.
Transferencia tecnológica: de lo público a lo privado
Una de las cuestiones centrales que destaca el documento, gira en torno a la necesidad de la potenciación de la transferencia tecnológica, que es una de las grandes asignaturas pendientes en el país. La tecnología es ya una competencia universal en cualquier sector de la economía, esencial para el desarrollo de las empresas y el crecimiento de los países. En este sentido, el análisis incide en la importancia de la inversión en investigación, desarrollo e innovación, ámbito que está estrechamente ligado a la universidad.
El informe señala algunas propuestas destinadas a dar un nuevo impulso a las políticas de transferencia, así como para proteger el interés público. Estas medidas incurren en distintos ámbitos del proceso y abarcan desde la protección del conocimiento de universidades y centros de investigación, hasta el fomento e incentivación de la transferencia o la participación de investigadores en spin-off (de la propia universidad).
España, a la cola en inversión en I+D
A pesar de que en España hay un excelente nivel en investigación, el análisis no tiene noticias halagüeñas para este ámbito. Desde que tuvo lugar la crisis de 2008, el país se encuentra por debajo de la media europea en inversiones destinadas a i+D+i, lo cual, según el estudio, podría tener consecuencias negativas en la competitividad a medio y largo plazo.
En consecuencia, otra de las medidas que propone la Cámara es aumentar los incentivos para los universitarios a la hora de crear empresas de base tecnológica, potenciar las oficinas de transferencias de las Universidades o aumentar el tamaño medio de las empresas españolas. Asimismo, hace referencia a la necesidad de dar mayor prioridad al sistema educativo y alcanzar un Pacto de Estado para aprobar una nueva Ley Orgánica Universitaria.
La universidad, escenario clave para las empresas
La producción científica española ocupa el decimoprimer lugar según el volumen en Europa. No obstante, la mayoría de las investigaciones acaba en revistas científicas y no en el mercado. El documento señala que se prescinde así de buena parte del potencial de las universidades y se desaprovecha la oportunidad de mejorar su financiación. ¿Cómo se puede corregir esta situación?
Una de las posibles respuestas está en la colaboración universidad- empresa. Esta sinergia aporta un beneficio mutuo con consecuencias muy positivas para el conjunto de la economía y el bienestar colectivo. De este modo, la Cámara de Comercio de España lleva años trabajando conjuntamente con otras instituciones y creando el terreno necesario que ha dado lugar a este análisis que aporta un conocimiento concreto sobre el contexto invesitigador de la nación.
Lamentablemente, este tipo de colaboración en el terreno de la transferencia tampoco se ve favorecida por la composición de un tejido productivo, en su inmensa mayoría constituido por pequeñas empresas, poco intensivas en competencias tecnológicas. Esto pone de manifiesto, como indica el estudio, la urgencia por mejorar la investigación y la innovación en la estructura productiva del país.
Crear una plataforma para la difusión de tecnologías
Con el fin de fomentar e incentivar la transferencia, este análisis anima al legislador a aglutinar el régimen de transferencia en una única norma, con el objetivo de evitar ciertas duplicidades entre la Ley de Economía Sostenible y de la Ley de la Ciencia. Para ello sugiere la posibilidad de promocionar actividades de transferencia a través de sociedades si existen ventajas económicas, de impacto social o de difusión.
Además, propone la creación de una plataforma estatal de difusión de las tecnologías generadas en centros públicos de investigación y solicita que permita elaborar una normativa que reconozca a la actividad de transferencia como concepto evaluable a efectos retributivos y de promoción.
Participación de investigadores en empresas
Por último, para favorecer la participación de investigadores en empresas filiales o spin-offs, algunas de las recomendaciones recogidas en el informe inciden en suavizar los requisitos de participación de la entidad pública en la empresa filial.
A cambio las empresas recibirían compensaciones en caso de incremento de valor, como el estudio propone, se exigiría que los acuerdos entre spin-offs y centros de investigación se suscriban en términos de mercado y velando por evitar potenciales conflictos de interés.