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Una alternativa con buenos resultados para encontrar empleo en el extranjero
Varios jóvenes explican a Crónica Global su experiencia tras acogerse al Plan de Movilidad de la Cámara de Comercio de España, con el que han podido trabajar en prácticas en el extranjero
16 octubre, 2018 00:00España es el segundo país de la Unión Europea con una mayor tasa de desempleo juvenil (33,8%), tan sólo por detrás de Grecia (43,2%) y ligeramente por encima de Italia (31,9%). Ante la falta de trabajo en nuestro país, muchos optan por emigrar a otros países para encontrar un empleo. En concreto, el 64% de los jóvenes españoles desempleados están dispuestos a desplazarse fuera de España para conseguir un trabajo, según datos de Eurostat.
Jesús Gómez, de 29 años, es uno de esos miles de jóvenes que decidió irse fuera para aprender inglés y buscar un empleo. Como tantos otros, aterrizó en Londres, donde empezó limpiando platos en un restaurante de la ciudad. Mientras vivía en la capital del Reino Unido, un familiar le informó del “Plan de Movilidad”, integrado en el Plan PICE de la Cámara de Comercio de España.
Tres meses de beca
A partir de aquí, Jesús decidió ponerse en contacto con la Cámara de Comercio de Segovia –su ciudad–, que le informó de los trámites que debía realizar, que incluían una prueba de nivel de inglés. Regresó a España para realizar las gestiones, y una vez le concedieron la beca, la Cámara de Comercio le buscó una empresa donde realizar las prácticas.
Fue en Londres, en un despacho de abogados, donde empezó a trabajar en noviembre de 2017. La beca de la Cámara dura tres meses y está dotada con un total de 2.500 euros. Aunque las empresas pueden pagarte un sueldo como complemento de la beca, este no fue el caso de Jesús, que reconoce a este medio que con esa cuantía no podría haber vivido en Londres de no ser porque vivía en casa de un amigo. Al acabar las prácticas, la empresa le ofreció “trabajar gratis”, y aunque le hubiera “gustado estar más tiempo en la empresa”, empezó a buscar trabajo desde ahí y acabó incorporándose a un despacho en Segovia.
Rapidez del proceso
El Plan de Movilidad, integrado en el Programa Integral de Cualificación y Empleo (PICE) de la Cámara de España, dio sus frutos, y cumplió el objetivo principal que tiene establecido. Jesús se muestra “muy satisfecho” tras haber participado en este programa. Consiguió un empleo en el extranjero dentro de su especialidad –la abogacía--, y posteriormente consiguió un trabajo con unas buenas condiciones laborales en España, “dejando atrás la etapa de becario”.
Jóvenes informándose en una feria de empleo juvenil / EFE
Otro caso de éxito es el de Cristina Pino, arquitecta granadina de 30 años. Ella también acudió a las oficinas de la Cámara de Comercio de Granada, ubicada cerca de su casa, para informarse sobre el Plan de Movilidad. En su caso, le interesaba hacer prácticas profesionales, y para ello necesitaba establecer un convenio con alguna empresa. Cristina encontró un estudio en Oporto, y según explica ella misma, las gestiones y “papeleo” con la Cámara de Comercio fueron bastante rápidas y ágiles. Algo en lo que coinciden la mayor parte de beneficiados del Plan de Movilidad consultados, que destacan la rapidez del proceso y de las gestiones de la entidad cameral.
Respaldo europeo
Esta iniciativa de la Cámara de España cuenta con un gran respaldo institucional para incidir en las políticas de empleo. En concreto, cuenta con el apoyo del Ministerio de Empleo y del Fondo Social Europeo, y está destinado a jóvenes de entre 16 y 29 años de la Unión Europea y Suiza empadronados en territorio español en situación de desempleo.
Andrea Sancho también es otra joven que se encontraba en esta situación. Licenciada en Derecho por la Universidad de Valencia, y con varios masters a sus espaldas, estaba buscando empleo tras haber trabajado en diversas ONG’s y en el campo de la investigación.
Las empresas, satisfechas con el programa
En su caso, la Cámara de Comercio de Valencia le encontró un trabajo casi hecho a medida en Bélgica, en una consultora de Asuntos Públicos que buscaban a una persona con su perfil. Se trata de la empresa Vinces, que tras la apertura de una nueva oficina en Bruselas decidieron formar parte de la Cámara de Comercio de España en Bélgica y Luxemburgo. Según explica David Córdova, CEO de la empresa, desde esta institución les “animaron a formar parte del programa, y desde un primer momento nos pareció una oportunidad para atraer talento joven a nuestro proyecto”.
David Córdova, CEO de la empresa Vinces
“En Vinces éramos conscientes de que el perfil que estábamos buscando en ese momento debería reunir unas capacidades y cualidades específicas y desde la Cámara nos ayudaron a encontrar a la persona adecuada. La capilaridad de la red de la Cámara de España y su experiencia en Bélgica y Luxemburgo han sido claves para identificar y a atraer el talento que requeríamos”, añade el director de Vinces.
En cuanto a las ventajas para la empresa, Córdova resalta el haber podido “contar con la persona adecuada, a la que desde la Cámara de España se le ha apoyado en su traslado a Bruselas y se le ha facilitado su estancia los primeros meses en la ciudad”.
"Ha superado nuestras expectativas"
A la hora de valorar el programa, desde Vinces se muestran muy satisfechos tras la incorporación de Andrea a la plantilla, por lo que tendrán “muy en cuenta esta opción” cuando busquen a alguien en un futuro. “Creemos que la cámara de España a través del Plan de Movilidad nos ha ayudado a identificar y a atraer el perfil que necesitábamos. Por ello consideramos que el programa no solo se ha cumplido, sino que, en ciertos aspectos, ha superado nuestras expectativas” sentencia el director de la empresa.
Esta satisfacción coincide con los objetivos marcados por la Cámara de Comercio de España. María Tosca, directora de Empleo, Formación, y Emprendimiento de la insitución explica que “a través del Plan de Movilidad queremos promover que los jóvenes españoles terminen de formarse en el extranjero y les ofrecemos la oportunidad de abrir las fronteras de su desarrollo profesional en otros países europeos.” “Así –prosigue-- mejoran no solo su cualificación profesional y el manejo de un idioma extranjero, sino que también adquieren una visión más global del mundo laboral, imprescindible en un mundo internacionalizado como el nuestro”.