
Assumpta Pujol, fiscal
La Fiscalía Superior de Justicia de Cataluña rechaza la posibilidad de indultar a la exconsellera y expresidenta del Parlament Laura Borràs (Junts) al no haber apreciado en ella "el más mínimo signo de arrepentimiento" del delito de corrupción por el que fue condenada
La exmandataria ultranacionalista fue sancionada con cuatro años y medio de cárcel, y 13 de inhabilitación, por haber fraccionado varios contratos a dedo para asignárselos a un amigo cuando dirigía la Institució de les Lletres Catalanes (ILC), entre 2013 y 2018.
El informe de la Fiscalía es contudente, pues concluye que Borràs "no ha aceptado en ningún momento su responsabilidad" en los hechos, ni demostrado arrepentimiento alguno. No sólo eso, sino que trató de desligitimar la actuación jurisdiccional diciendo que era víctima de una persecución por sus ideas políticas. Por lo tanto, según la fiscal Assumpta Pujol, "no se da ninguna razón fundamentada en derecho" que justifique ese indulto.
Ahora, la pelota está en el tejado del Gobierno, después de que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) dictara el pasado marzo un auto de propuesta de indulto parcial favorable a Borràs. Hasta la fecha, el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha concedido todo tipo de privilegios favorables a la impunidad judicial de sus socios secesionistas a cambio de su apoyo parlamentario. ¿Volverá a repetirse la historia en el caso de Borràs?