Noticias relacionadas
Gerard Piqué vuelve a hacer bandera de su nacionalismo a cuenta del referéndum ilegal y unilateral del 1-O. El excentral del Barça saca a relucir ahora, siete años después, un supuesto episodio ocurrido en aquellas fechas cuando, según su versión, el técnico y el capitán de la selección española -Julen Lopetegui y Sergio Ramos- le dijeron que "pidiera perdón" por su apoyo entusiasta a lo que llama "derecho a decidir".
El empresario catalán ha presumido en una entrevista a TV3 de haber rechazado en su momento esa presunta petición, y se ha jactado de haber "tirado a la papelera" un escrito que le dieron sobre lo que debía decir a la afición en una rueda de prensa. Con el victimismo que le caracteriza, también se ha quejado de que, por ese alineamiento con el procés, "cada vez que iba con la selección era un follón, había muchos pitos".
Cierto es que el rendimiento de Piqué con la Roja no decayó, y que su profesionalidad en los terrenos de juego continuó siendo intachable. Pero su sensibilidad por hechos como los que relata contrasta con su aparente falta de ella hacia quienes pudieron sentirse molestos con su defensa de la votación ilegal secesionista. Por no hablar de los muchos ciudadanos de a pie que, en los últimos años, se han podido sentir presionados, violentados o incluso agredidos por acciones y movilizaciones de mandatarios y simpatizantes de la independencia de Cataluña.