Sectario. No se puede calificar de otra manera el veto de la delegación del Govern catalán en Madrid a la presentación del libro de Joan Ferran en el que se retrata el brazo friki del proceso independentista.

En una semana en la que el secesionismo dice defender la libertad de expresión y el humor, la Generalitat ha decidido amordazar la obra del articulista de Crónica Global. La doble vara de medir es indignante.