Los resultados del estudio Paraula de Barcelona, relevantes porque se basan en casi 20.000 entrevistas, son demoledores y solemnizan sondeos similares. Los barceloneses están descontentos con la gestión de Ada Colau. Un proyecto tan emblemático con las superillas no convence. Y su política de vivienda está jalonada de incumplimientos y decepciones. Los entrevistados denuncian el retroceso que ha sufrido su ciudad en los últimos años. Pero Colau hace oídos sordos.