Enrique Bañuelos

El hecho de que finalmente solo haya llegado una propuesta a la mesa del Consorcio de la Zona Franca para dar continuidad al complejo industrial abandonado por Nissan ya es, de por sí, una mala noticia. Si, además, el empresario Enrique Bañuelos forma parte del grupo que aspira a reindustrializar el recinto, el asunto toma tintes casi trágicos. El precedente de BCN World, en el que buena parte de la Generalitat se echó en sus brazos para asistir posteriormente a la espantada ante la falta de financiación, debería bastar para generar una buena dosis de desconfianza. Si aun así persisten las dudas, basta con echar un vistazo a su currículum, con sonados “petardazos” como Astroc, Veremonte, la inversión en Amper… y el último en la sueca Inzile, hundida en bolsa tras la inversión de QEV Technologies, precisamente la compañía que forma parte del consorcio aspirante a tomar el testigo de Nissan. Conviene estar atentos.